El Gobierno británico ha anunciado este domingo su intención de introducir una reforma en el sistema de asilo en medio de las protestas de las últimas semanas contra la presencia de inmigrantes y las correspondientes contramanifestaciones a favor del derecho de asilo.
El objetivo final sería reducir el número de inmigrantes –unos 32.000 actualmente– que son alojados en hoteles costeados por el Estado a la espera del resultado del proceso de solicitud de asilo, según recoge la televisión pública británica BBC.
Para ello se creará un organismo independiente para acelerar la decisión sobre cada caso y evitar así «retrasos inaceptables», en palabras de la ministra del Interior, Yvette Cooper.
«No podemos seguir con estos retrasos completamente inaceptables en los recursos consecuencia del sistema que hemos heredado y que implican que los solicitantes de asilo a los que se les ha denegado (en primera instancia) se quedan durante años y acaban suponiendo un gran coste para las arcas públicas», ha argumentado Cooper en un comunicado oficial.
La media del proceso de decisión sobre una solicitud de asilo está en estos momentos en algo más de un año y hay unos 51.000 procedimientos abiertos actualmente.
El anuncio de reforma del sistema de asilo indica en cualquier caso que los detalles de la propuesta para una vía rápida de decisión se presentarán en otoño. Además, destaca que «estamos aprendiendo de las experiencias de otros países europeos».
Este mismo sábado se han registrado numerosas manifestaciones bajo el lema «Abolamos el sistema de asilo» en ciudades como Bristol, Exeter, Tamworth, Cannock, Nuneaton, Liverpool, Wakefield, Newcastle, Horley y en el distrito de oficinas de Canary Wharf –Muelle Canario–, en el centro de Londres. También ha habido protestas en Aberdeen y Perth (Escocia) y en Mold y Flintshire (Gales).
En respuesta, Stand Up to Racism (Álzate Frente al Racismo) ha convocado concentraciones en Bristol, Cannock, Leicester, Liverpool, Newcastle, Wakefield, Horley y Long Eaton, en Derbyshire. En algunas ciudades ha habido disturbios y enfrentamientos entre los grupos rivales.
El Partido Conservador, en la oposición, ha denunciado que el actual sistema de asilo es un «caos» y desde el partido ultraderechista Reforma Reino Unido han defendido la deportación en masa de quienes hayan entrado en el país por medios ilegales.