El ministro de Justicia de Bolivia, Cesar Siles, aseguró este viernes que es el “momento oportuno” para que la Policía detenga al ex presidente Evo Morales, tras las recientes jornadas de protestas violentas protagonizadas por sus seguidores, las cuales han resultado en la muerte de cuatro policías y un civil.
Según Siles, la Fiscalía y los jueces ya han cumplido su papel emitiendo las pertinentes órdenes de detención y las resoluciones judiciales necesarias, por lo que ahora corresponde a la Policía ejecutar dichos mandamientos.
“Es momento de hacerlo, el 90 por ciento está pidiendo eso, la aprehensión de Evo Morales”, expresó y añadió que los recientes sucesos en Llallagua y Chapare corresponden a “un Estado de no derecho”.
El funcionario recordó, además, que entre las denuncias contra el ex presidente se incluyen delitos de terrorismo relacionados con los once días continuos de bloqueos y protestas orquestadas por sus partidarios, en respuesta a su inhabilitación para las elecciones del 17 de agosto, una situación que se mantiene al presente y que escala día a día.
Así, el ministro condenó las medidas de fuerza y denunció la existencia de “intereses personales de grupos reducidos que no quieren que las elecciones se lleven a cabo”.
En su mismo tono, Manfred Reyes Villa, alcalde de Cochabamba y candidato presidencial, también instó la víspera al Gobierno de Luis Arce a ejecutar la orden de aprehensión contra Morales, como mecanismo para poner fin al bloqueo de carreteras que lideran sus simpatizantes.
“La solución acá es tomar preso a este señor (Morales) y con eso se terminan los bloqueos y se acaba todo”, manifestó en una conferencia de prensa con en La Paz.
“El señor Evo Morales tiene varias órdenes de aprehensión por pedofilia, abuso y violación a niñas menores. Este señor debiera estar preso hace mucho tiempo, (pero) se ha ido al Chapare (Trópico de Cochabamba) y ahí ha hecho su refugio”, añadió Reyes Villa, haciendo referencia al paradero de los últimos meses del político, donde ha estado protegido por sus simpatizantes.
Inclusive, acusó al cocalero de haber estado tramando durante todo este tiempo, un plan para “inducir a la confrontación” con el fin de “suspender las elecciones” y luego favorecer “una solución por el desastre” que habilite su candidatura, tras haber quedado fuera de los comicios.
Es por ello que el candidato de Autonomía para Bolivia–Súmate criticó al Ejecutivo de Arce por no haber ejercido las debidas facultades legales en el caso, argumentando que “si lo hubiese hecho antes, no habría pasado nada” de lo que ocurre en estos momentos.
La situación de Evo Morales en Bolivia lleva meses deteriorándose.
A finales de 2024, la Fiscalía dictó una orden de arresto por una denuncia de trata agravada de personas, en relación con alegaciones de haber mantenido una relación con una menor, con quien supuestamente tuvo un hijo durante su mandato presidencial.
Desde entonces, ha estado refugiado en el Trópico de Cochabamba, por temor a ser detenido.
Recientemente, luego de que la Justicia electoral prohibiera la inscripción de su candidatura presidencial por no cumplir con los requisitos establecidos por la ley, sus simpatizantes, iniciaron una serie de protestas y bloqueos de caminos, que han alterado el orden social, elevado la tensión política, generado pérdidas millonarias en el país, y desatado una ola de violencia y enfrentamientos con la Policía, que ya dejó múltiples heridos.
Algunas de las situaciones de mayor gravedad se dieron durante los operativos de desbloqueo en Llallagua, Potosí, y la ciudad de Cochabamba.
(Con información de Europa Press)