El Gobierno de México ha presentado un plan integral de negocios para que la petrolera estatal Petróleos Mexicanos (Pemex) consiga la autosuficiencia financiera en 2027.
«Para 2027, Pemex no va a necesitar la ayuda de la Secretaría de Hacienda», avanzó la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, durante la presentación en su conferencia de prensa diaria de este martes de las medidas que ejecutará el Ejecutivo para saldar las deudas pendientes de la empresa.
Sheinbaum ha reiterado que Pemex necesitará el apoyo gubernamental durante el ejercicio actual y el siguiente para pagar amortizaciones de deuda con intereses muy altos. En concreto, la petrolera acumula una deuda superior a los 100.000 millones de dólares (86.348 millones de euros) debido, según la presidenta mexicana, a la mala gestión e inversión insuficiente de presidentes previos a la llegada de Andrés Manuel López Obrador.
Entre las iniciativas, destaca la creación por parte del Gobierno mexicano de un vehículo de inversión con recursos de hasta 250-000 millones de pesos (11.484 millones de euros) para la gestión y administración de pagos dirigidos a proyectos de inversión en 2025. Según ha explicado el director general de Banobras, Jorge Mendoza, se financiará por parte de la banca de desarrollo (Banobras, Nafin y Bancomext), de la banca comercial y de inversores particulares.
Al mismo tiempo, y según ha adelantado el director ejecutivo de Pemex, Víctor Rodríguez, la empresa aumentará su producción a través de la reactivación de antiguos pozos, la explotación de recursos como los yacimientos marinos de Zama y Trion, la mejora de la eficiencia en las refinerías y la ampliación de la producción petroquímica.
Durante la presentación, el Gobierno mexicano aludió a la mejora de la calificación de Pemex de B+ a BB con perspectiva estable por parte de Fitch Ratings poco después de conocerse la colocación de Notas Estructuradas Pre Capitalizadas (P-Caps) por 12.000 millones de dólares (10.362 millones de euros) para aliviar la carga de deudas de la petrolera.