Madrid, 2 jun (EFECOM).- El juez de la Audiencia Nacional que investiga la presunta estafa con criptomonedas de Madeira Invest, cuyo cabecilla, Álvaro Romillo, entregó 100.000 euros al eurodiputado Alvise Pérez, ha pedido a Hacienda asistencia para determinar si la organización ha cometido delito fiscal.
En un auto fechado el pasado 30 de mayo al que ha tenido acceso Efe, el juez José Luis Calama requiere la colaboración de la Agencia Tributaria «para determinar la posible existencia de cuotas tributarias defraudadas por parte de los hasta ahora investigados».
Se trata de la causa que investiga una serie de denuncias -de la asociación de consumidores Ances, la Asociación de Usuarios de Criptomonedas y la Asociación de Afectados por Inversiones en Criptomonedas- por una supuesta estafa piramidal contra la plataforma de inversiones Madeira Invest, cuyo cabecilla, Alvaro Romillo, entregó 100.000 euros al eurodiputado Alvise Pérez.
El juez aprecia hechos que pueden ser constitutivos de un delito continuado de estafa agravada, blanqueo y organización criminal, con un perjuicio denunciado por las acusaciones que supera los 11 millones de euros pero que podría rebasar los 300, y un número de afectados que ronda los 30.000.
En su auto, Calama atiende también la solicitud de Hacienda de suspender los procedimientos inspectores relativos a los ejercicios impositivos investigados, ya que pudiera haber «conductas que pudieran llegar a constituir delito contra la Hacienda Pública, para el caso de que no se llegara acreditar la existencia del delito de estafa».
Asimismo, pide a la Agencia Tributaria que nombre urgentemente «los auxilios necesarios para determinar la posible existencia de cuotas tributarias defraudadas por parte de los hasta ahora investigados en esta causa en relación con los períodos impositivos, conceptos y contribuyentes» que se investigan, 2022 y 2023.
El fundador de Madeira Invest, Álvaro Morillo, conocido en redes sociales como «CriptoSpain», se anunciaba como experto en elusión fiscal y, con ese argumento, intentó convencer a cerca de 30.000 personas para que accedieran a su club privado de inversión, que ofrecía altísimos rendimientos, de más del 50 %, a través de inversiones en relojes, coches de lujo o inmuebles. EFECOM