Luego de la identificación de Diego Fernández Lima como el joven que fue asesinado y enterrado al lado de donde vivió Gustavo Cerati, el club Excursionistas, del ascenso argentino, publicó un mensaje en conmemoración al chico, quien al momento de su desaparición era futbolista del equipo porteño. Desde la institución manifestaron su tristeza por el hallazgo.
«Excursionistas expresa su estupor y tristeza por las noticias acerca de Diego Fernández Lima, quien fuera futbolista de nuestra institución al momento de su desaparición. Enviamos nuestras condolencias y un fuerte abrazo a toda su familia y deseamos que su alma finalmente pueda descansar en paz“, sostuvieron en el mensaje que fue difundido en redes sociales.
Además compartieron unas palabras que escribió Daniel Viviani, exdirigente y socio del club, tras la desaparición del joven. “(…) recordar a uno de los chicos más queridos de este plantel, que a mediados del año pasado desapareció de su casa. Me refiero a Diego Fernández Lima, mi querido gallego. Siempre te recordamos. Cada vez que nos reuníamos en el vestuario para salir a jugar un encuentro por el campeonato o las finales. Se juntaban las manos y nuestro esfuerzo era por dos cosas: Excursionistas y por el grito del partido final. Alguna lágrima corrió por mi cara al recordar a aquel nene que llevaba a Montevideo años atrás”, relató.
En mayo de este año, albañiles trabajaban en la construcción de un edificio ubicado en un lote en Congreso al 3700, en lo que había sido la casa donde vivió Gustavo Cerati a principios de este siglo, cuando encontraron restos óseos. Comenzó la investigación para determinar a quién correspondían y este miércoles se determinó que se trataba de Fernández Lima, quien tenía 16 años y había desaparecido el 26 de julio de 1984 entre los barrios de Villa Urquiza y Belgrano.
Tras no dar con su paradero, la familia del joven quiso hacer una denuncia en una comisaría de la Policía Federal Argentina (PFA), pero no se la tomaron. Su padre, Juan, murió sin saber qué había pasado con su hijo, mientras que, ahora, su madre y sus hermanos conocieron su triste final.
Dos años después de la desaparición, Juan Benigno, padre de Diego, señaló a la revista Esto!, editada por Crónica: “La policía dice que tiene tres mil casos iguales. Y fíjese qué absurdo: desde el primer momento lo caratularon ‘fuga de hogar’. Yo protesté y ¿sabe qué me dijeron? Que así estaban impresos los formularios. Me negué a eso, pero fue como si nada. ¿Qué quiere que investiguen si ya dan por sentado que él se fue, no me que me lo robaron“.
Tal como había informado LA NACION antes de identificar el cuerpo del joven, se trató de una muerte violenta. “No se sabe si la puñalada provocó la muerte, pero sí con certeza sabemos que el muchacho fue apuñalado. La herida cortopunzante estaba a la altura de la cuarta costilla, como por detrás del brazo. También hay signos de que se intentó desmembrar el cuerpo”, explicaron fuentes judiciales en su momento.