Jerusalén, 13 may (EFE).- El patriarca latino de Jerusalén, Pierbattista Pizzaballa, dijo este martes que confía en que las autoridades israelíes buscarán una mejor relación con la Santa Sede tras la elección del nuevo papa, León XIV.
En una rueda de prensa en la sede del Patriarcado, Pizzaballa explicó que la decisión de enviar al presidente israelí, Isaac Herzog, a la ceremonia de investidura que se celebrará la semana que viene en el Vaticano es una muestra de esas intenciones.
«La situación ha cambiado. Yo interpreto esto como un deseo de mejorar las relaciones», aseguró el cardenal, tras recordar la controversia que generó el hecho de que Israel no enviara ninguna figura pública al funeral del papa Francisco, donde el país estuvo representado por su embajador.
La visita de Herzog, que de momento no ha confirmado su oficina, fue avanzada hace dos días por el periódico israelí The Jerusalem Post.
Pizzaballa, que antes del cónclave sonaba como papable, dijo que hubo un «amplio y claro» acuerdo entre los cardenales sobre las decisiones a tomar tras la muerte de Francisco.
«Hay dos cónclaves, el mediático y el real», llegó a decir el cardenal sobre las informaciones que apuntaban a que él era uno de los favoritos para suceder a Francisco.
En particular, el patriarca destacó que el hecho de que hubiera más de 200 cardenales de todos los países participando en el cónclave supuso que uno de los principales temas de conversación fueron las diferentes guerras que asolan al mundo, no solo en Ucrania o Gaza sino también en lugares como Sudán del Sur.
Pizzaballa dijo además que en algún momento habrá que organizar una visita a Oriente Medio para León XIV, pero matizó que llevará tiempo. «Dejadle respirar», bromeó. EFE
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