El primer ministro de República Checa, Petr Fiala, ha pedido a su homólogo eslovaco y vecino, Robert Fico, que se replantee su postura de veto al nuevo paquete de sanciones de la Unión Europea contra Rusia por la guerra de Ucrania por una cuestión de «libertad, seguridad y solidaridad».
«Dadas las estrechas relaciones entre nuestros países, le he pedido que reconsidere su postura sobre el paquete de sanciones y contribuya a mantener la unidad y la determinación con la que el mundo democrático enfrenta la agresión rusa», ha explicado Fiala en un comunicado publicado en su cuenta de la red social X sobre la carta que ha enviado este pasado sábado a Fico.
«Creo que Eslovaquia, como nuestro socio más cercano en la región, asumirá su responsabilidad con los valores europeos comunes de libertad, seguridad y solidaridad», ha añadido el primer ministro checo.
Fico reconoció este pasado jueves que sigue habiendo «temas pendientes» auque espera un acuerdo pronto con la Comisión Europea sobre las garantías a su suministro energético, asunto que aduce para vetar la 18ª ronda de sanciones europeas contra Rusia.
«Debo reconocer que la Comisión Europea se está esforzando por encontrar una solución para Eslovaquia. En algunas cuestiones pendientes estamos cerca de un acuerdo, en otras aún estamos lejos», señaló el primer ministro eslovaco en un mensaje en redes sociales donde argumentó la postura de Bratislava, cuya negativa bloquea la adopción del nuevo paquete de sanciones de la UE, que incluye medidas contra la energía rusa, bancos y la ‘flota fantasma’.
En este sentido, Fico ha señalado que el apoyo de Eslovaquia a las sanciones es «contingente» a abordar las preocupaciones del país sobre los precios del gas, la seguridad del suministro y a recibir una compensación por el «daño incurrido» por el cese del suministro de gas previsto para enero de 2028.