Cada vez que se habla de un gran caos, inmediatamente resuena una frase que comenzó a utilizarse desde la guerra que se vivió en la región balcánica a fines del siglo pasado: “Esto es Kosovo”. Si bien aquello derivó en la independencia de Serbia, aunque su reconocimiento internacional no es total y la tensión entre ambos países continúa, especialmente en la zona fronteriza, hoy está lejos de clima bélico y el desorden social por la disputa del territorio con la que convivió por años. Se reconstruyó mayormente y en medio de sus paisajes pintorescos y un ambiente amigable fuera de las aglomeraciones, su selección de fútbol sueña con jugar por primera vez un Mundial.
En la continuidad de las eliminatorias europeas, este sábado visita a Eslovenia con la posibilidad de asegurarse, al menos, un lugar en el repechaje. Con dos triunfos, un empate y una derrota en cuatro partidos, Kosovo suma 7 puntos y está segundo en el grupo B, a tres del líder Suiza y por delante de su rival de hoy, que tiene 4, y de Suecia (1). Así, un empate en el estadio Stozice de Liubliana le garantizará el segundo lugar y una oportunidad a fines de marzo de 2026, cuando 16 selecciones busquen las últimas cuatro plazas por ese continente.
Los kosovares, con un plantel que mezcla jóvenes con experimentados, se aferra al coraje, al hambre de gloria y a la convicción de que algo grande está a su alcance. Esfuerzo, disciplina y talento como banderas. Sueña con un marco impensado hasta hace poco. En sus calles, en sus bares, en sus casas, en las montañas, la ilusión de llegar, incluso, por primera vez a un repechaje, a las puertas de un Mundial, le pone un contorno inédito. Tiene más de una oportunidad.
Entre sus principales jugadores están Amir Rrahmani, defensor campeón de la Serie A con Napoli dos veces; Edon Zhegrova, que nació en Alemania y juega en el mediocampo de la Juventus; Vedat Muriqi, delantero del Mallorca de España; Arijanet Anan Muric, el arquero del Sassuolo italiano, y Fisnik Asllani, que anotó en la última jornada de eliminatorias el gol del 1-0 ante Suecia, al que ya habían derrotado por 2-0 como local.
El triunfo de Kosovo sobre Suecia
Eslovenia es un rival directo en la lucha por ese segundo lugar de la zona, aunque matemáticamente Kosovo puede incluso aspirar a meterse directamente al Mundial si gana los dos partidos que le quedan. Pero con eso solo (y nada sencillo) no le alcanza, ya que Suiza -su rival del martes próximo en la última fecha, como local en Pristina- debería perder, además, hoy abultadamente con Suecia, que está último, despidió a su DT y aguarda la lista de selecciones clasificadas para la repesca por su desempeño en la Nations League, lo que es un hecho. Y si Kosovo quedara tercero en el grupo, está ese sendero alternativo que pocos ven…
Como se sabe, los ganadores de los 12 grupos irán directo a la Copa del Mundo que se hará en Estados Unidos, México y Canadá. Ya lo lograron Inglaterra, Francia y Croacia. Quedan nueve cupos directos. Los playoffs los jugarán los 12 segundos de cada uno de los grupos y 4 equipos que tendrán su acceso por lo hecho en la última UEFA Nations League. Se medirán en duelos de eliminación directa, a un solo partido. Habrá cuatro caminos (con semifinales y final) y los ganadores de cada uno se clasificarán.

Los equipos de la Nations League serán los cuatro mejores de cada Liga, según las posiciones generales, pero los ya clasificados al Mundial y los que lograron llegar al repechaje mediante las eliminatorias quedarán excluidos, por supuesto. Entonces, allí aparece la tabla silenciosa, la que se construye una vez conocidos los 12 que aseguraron su boleto y los 12 que siguen en camino. En ese torneo, Kosovo logró el ascenso a la Liga B, tras otra repesca en la que salió a flote al derrotar a Islandia, en marzo pasado, tras una buena campaña.
El triunfo de Kosovo ante Islandia para ascender a la Liga B
Si los kosovares no terminan primero o segundo en su grupo, aparece la vía alternativa, donde ya dependerá de otros resultados y de cómo le vaya a otras selecciones, por ejemplo Macedonia del Norte, que si termina entre los dos primeros en el grupo J libera un cupo para una selección de buen rendimiento en la Nations League. Suecia e Irlanda del Norte, tercera en el grupo A, encabezan ese listado al que le faltan dos nombres.
Si es así, será tiempo de hacer cuentas y ver probabilidades el martes, antes del duelo como local con Suiza. Mientras tanto, Kosovo sabe que un empate ante Eslovenia, como el 0-0 que se registró en el partido de ida el mes pasado, le traerá la paz deportiva hoy mismo. Si se asegura el repechaje, quedará a dos triunfos del Mundial. Un sueño que nadie puede quitarle, que está en sus manos.
Para la siguiente instancia, se sortearán cuatro llaves y los cabeza de serie (definidos por ranking FIFA) serán locales, a partido único. Las semifinales se disputarán el 26 de marzo de 2026 y las finales cinco días más tarde, el 31.
