A solo 20 minutos de Ciudad de México, se encuentra Lomas de Chapultepec, una de las zonas residenciales más exclusivas de la capital. Puede decirse que surgió en la década de 1920 casi como una ‘colonia’ formada por las familias de la élite mexicana e inmigrantes de alto poder adquisitivo provenientes de Europa.
De calles onduladas, frondosas arboledas y amplios lotes, hasta 1924 llevó el nombre de Chapultepec Heights cuando, por orden del presidente Plutarco Elías Calles, se prohibió el uso de idioma extranjero en letreros y anuncios publicitarios.
Con los años, la zona fue incorporando barrios que tomaron parte de su nombre para dar cuenta de su pertenencia. Uno de ellos es Lomas Altas, donde se ubica la casa que recorremos hoy, un área codiciada por su estilo de vida discreto y sofisticado.
El sello del artista
Así como las obras de grandes maestros del arte pueden identificarse rápidamente con su autor, Jaime Arena ha creado un lenguaje arquitectónico propio. “La gente me busca por mi estilo definido”, sintetiza uno de los arquitectos más aclamados de su país, autor, entre otras cosas, de la casa de Lina Botero o de la remodelación de la Casa de México. “Mis clientes no vienen a decirme de qué forma o estilo quieren su casa. Más bien, ellos quieren un Jaime Arena”.
Unos meses antes de terminar la obra, el arquitecto y diseñador presenta un proyecto de interiorismo donde plantea la distribución del mobiliario, los cuadros y elementos decorativos.
Solución a medida
“Hacer esta casa implicó un desafío y un dilema. En este caso, mis clientes eran un matrimonio mayor que quería algo más chico de lo que tenía, aunque con espacio suficiente para recibir a hijos y nietos. Su idea era hacer una casa de un solo piso, pero por las restricciones del terreno y del condominio, no resultaba posible resolver todas sus necesidades en un mismo nivel”, recuerda Arena.
El arquitecto resolvió entonces mantener los ambientes donde transcurre la vida cotidiana de la pareja en planta baja: dormitorio, biblioteca, sala de estar, comedor, recibidor, cocina y un family room. Arriba y abajo de eso, les dio lugar a actividades de uso esporádico, o que no los interpela directamente: en primer piso, dos cuartos de huéspedes; en el subsuelo, sala de máquinas, cuarto de servicio y estacionamiento.
Con acento contemporáneo, los proyectos de Arena se distinguen por el uso de materiales naturales, techos altos y ambientes de tamaños majestuosos.
El dormitorio principal ubicado en planta baja se comunica con la biblioteca mediante puertas corredizas que se pueden cerrar completamente para mayor privacidad”.
Lujo y sostenibilidad
El proyecto de Lomas Altas incorpora un sistema de recolección de agua: en el cuarto de máquinas hay una cisterna que recolecta el agua de lluvia y de los baños, que luego se utiliza para el riego. “Desde hace unos ocho años, toda las casas que hago tienen celdas solares para agua caliente e iluminación”, resalta Arena sobre la incorporación de tecnología sustentable en sus últimos proyectos.