Una nueva encuesta nacional reveló una división profunda y creciente en torno al liderazgo del presidente Donald Trump. Más de la mitad de los estadounidenses lo definieron como un “dictador peligroso”, una percepción que refleja el temor de amplios sectores sobre el rumbo democrático de Estados Unidos bajo su administración.
La mayoría de EE.UU. cree que Trump es una amenaza para la democracia
El informe, elaborado por Instituto de Investigación de Religión Pública (PRRI, por sus siglas en inglés) entre el 28 de febrero y el 20 de marzo de 2025, entre más de 5000 adultos en Estados Unidos, arrojó resultados sobre cómo la ciudadanía evalúa estos primeros meses del segundo mandato del neoyorquino.
El dato más significativo de esta investigación fue que un 52% de los estadounidenses expresó su acuerdo con la frase: “El presidente Trump es un dictador peligroso cuyo poder debería ser limitado antes de que destruya la democracia estadounidense”. Esta afirmación no solo obtuvo mayoría, sino que reflejó una inquietud transversal, aunque fuertemente polarizada por líneas partidarias, religiosas y generacionales.
En contraposición, un 44% afirmó que Trump es “un líder fuerte que debería recibir el poder necesario para restaurar la grandeza de Estados Unidos”. Esta respuesta fue más frecuente entre votantes republicanos y sectores religiosos conservadores, especialmente quienes se identifican con el nacionalismo cristiano.
Los datos mostraron un quiebre rotundo:
- Entre los demócratas, el 87% sostuvo que Trump representa un peligro para la democracia.
- Entre los republicanos, el 81% lo consideró un líder necesario para la restauración de EE.UU.
- Entre quienes no votaron en las elecciones de 2024 y luego se arrepintieron, el 68% coincidió en que el republicano es un dictador peligroso.
- Incluso entre votantes de Trump que se retractaron de su decisión, el 55% compartió esa preocupación.
El informe, titulado Democracy at a Crossroads: How Americans View Trump’s First 100 Days in Office, publicado por PRRI, también señaló que las respuestas reflejan un temor profundo respecto a los riesgos de la concentración del poder presidencial.
Temor a un poder presidencial sin límites: la visión de los norteamericanos
Pese a que el respaldo a al presidente entre sus bases permanece sólido, la mayoría de los encuestados rechazó la idea de ampliar los poderes ejecutivos del presidente. Solo un 17% apoyó medidas como la postergación de las elecciones legislativas de 2026 o la posibilidad de modificar la Constitución para permitirle a Trump u otro más de dos mandatos.
Asimismo, el consenso sobre los límites del poder presidencial fue contundente:
- Un 89% sostuvo que ningún funcionario electo, incluido el presidente, debería estar por encima de la ley.
- El 78% rechazó la idea de que el presidente pueda ignorar decisiones del Congreso o de la Corte Suprema si las considera perjudiciales.
- El apoyo a esta visión autoritaria fue mucho más común entre republicanos (28%) que entre demócratas (9%).
Desaprobación generalizada sobre temas clave: la política de Trump en la mira
El liderazgo de Trump está lejos de generar consenso en áreas fundamentales. Su manejo de la economía, la inmigración y el conflicto en Ucrania recibió evaluaciones críticas de la mayoría de los encuestados:
- Solo el 41% aprobó su gestión económica.
- El 48% valoró positivamente sus políticas migratorias, aunque con diferencias notables según credo y etnicidad.
- Apenas el 40% apoyó su actuación frente a la guerra en Ucrania.
Estos resultados mostraron que, aunque su núcleo duro sigue firme, el mandatario enfrenta un escepticismo generalizado más allá de su círculo de seguidores fieles.
Los estadounidenses y la oposición a las medidas autoritarias y económicas de Trump
El sondeo también reveló un fuerte rechazo a algunas de las medidas tomadas por Trump en sus primeros meses. La mayoría cuestionó sus decretos ejecutivos y sus propuestas de reestructuración del Estado:
- Un 55% dijo que Trump se excedió al ordenar el despido masivo de empleados públicos.
- El 71% se opuso a cerrar o reducir drásticamente agencias federales, incluso si eso afectara la seguridad en salud, vuelos o agua.
- Un 65% rechazó nuevos aranceles a importaciones que encarecen los productos en el mercado local.