Un cabo del Ejército del Perú, de 19 años, denunció haber sido agredido y torturado por dos suboficiales en la ciudad de Iquitos (Loreto), según un informe difundido este lunes por RPP Noticias, que emitió parte de su testimonio.
El joven prestaba servicio militar en la Unidad Militar de Asentamiento Rural (UMAR) de Colonia Angamos, ubicada en la frontera con Brasil, pero se trasladó a Iquitos para recibir atención médica debido a problemas de salud.
De acuerdo con su denuncia, los suboficiales lo contactaron en esa ciudad y, mediante engaños, intentaron trasladarlo al Cuartel Alfredo Vargas Guerra. Sin embargo, en el trayecto desviaron la ruta establecida y lo llevaron a una vivienda donde lo encerraron en una habitación.
El denunciante afirmó que fue arrastrado, golpeado y torturado durante varias horas antes de ser abandonado en el lugar. Relató que, al comenzar a gritar, varios vecinos se alertaron por la situación. No obstante, cuando intentaron auxiliarlo, los presuntos agresores lo acusaron falsamente de ser un delincuente.
“Me tuvieron retenido contra mi voluntad. Forcejeé con ellos, quise escaparme, pedí ayuda a los vecinos. ¿Y qué dijeron? Que era un ratero y que estaba robando una motocar. ‘Vas a ver cuando lleguemos. Lo que te espera’”, declaró el joven a la emisora.
A pesar de la situación, la víctima logró pedir prestado un celular y se comunicó con sus padres, quienes acudieron de inmediato a rescatarlo. El paradero de los suboficiales implicados aún se desconoce, aunque se presume que habrían retornado a la localidad de Colonia Angamos.
Invocación de Defensoría
A través de un comunicado publicado en su cuenta de X (antes Twitter), la Defensoría del Pueblo informó que solicitó a la Comandancia General de la Quinta División del Ejército iniciar investigaciones urgentes para identificar responsabilidades y aplicar sanciones disciplinarias a los implicados en la agresión.
Representantes del organismo acompañaron a la víctima a la comisaría de la Policía Nacional (PNP) y a la Fiscalía Especializada en Derechos Humanos, que ha acogido el caso.