Quién no ha soñado alguna vez con tener un circuito privado de carreras para usarlo en cualquier momento. Pues hasta ahora es posible, ya que el Aspen Motorsports Park de Colorado está a la venta por 23 millones de dólares.
Los entusiastas del motor, la velocidad y las carreras tienen una oportunidad en el mercado inmobiliario de Colorado, que cuenta desde hace un par de meses con una exclusiva propiedad, un circuito ubicado en lo alto de las Montañas Rocosas y más concretamente a 2.444 metros de altura, una posición que regala una vistas únicas. Al cambio la pista tiene un valor de unos 19,6 millones de euros y su venta la lleva Aspen Real State.
Se puede considerar que esta localidad estadounidense fue la cuna de las carreras de vehículos deportivos en las Montañas Rocosas. En sus inicios, estas se organizaban por las calles sin pavimentar, pero con los avances tecnológicos y las mejoras en los coches, aumentó el peligro, lo que llevó al gobernador de Colorado a prohibir estas prácticas en la vía pública en 1955. De este modo, un grupo de residentes se reunieron para construir una pista de carreras, en un espacio de 18 hectáreas que debutó con su primer evento en julio de 1963, reuniendo algunos modelos como Porsche, Maseratti o Corvette.
Circuito divertido y exigente
Tras los primeros eventos en la pista, los participantes determinaron que era divertida y exigente. Desde entonces se convirtió en una de las favoritas de Colorado, por detrás de la antigua Continental Divide Raceways, y ha sido utilizada por el Sports Car Club of America, un grupo de motociclistas, fabricantes de automóviles y clubes de diferentes compañías.
Las condiciones y la extrema altitud también influyen, tanto en los pilotos como en los coches, ya que se reduce la potencia. Pocos autódromos en el mundo se acercan a esta altitud, siendo uno de los más destacados el Autódromo Hermanos Rodríguez, a 2.244 metros de altura en la Ciudad de México, por lo que los pilotos tienen la oportunidad de lidiar con menor oxígeno y un mayor esfuerzo para los motores de combustión interna al igual que en Fórmula 1.
Las instalaciones también incluían el Aspen Racing y el Racing Sports Car Club que ofrecía membresías con pases para carreras semanales, uso ilimitado de la pista, eventos patrocinados por un equipo de ingenieros, acceso a una pista de GoKart, una de Enduro, garajes para coches de carreras y una casa club. En las manos del nuevo propietario quedará si lo mantiente abierto al público como hasta ahora, o si lo convierte en un recinto de lujo privado.
Zona habitable
El anuncio, además de la pista de 1,8 kilómetros de longitud, un circuito todoterreno más corto y la pista de karts, indica que la zona permite construir una vivienda unifamiliar de hasta 534 metros cuadrados, o hasta 860 metros cuadrados con la adición de “Derechos de Desarrollo Transferibles”. Esta sería 7 veces más grande de la que ya existe de 120 metros cuadrados.
El circuito se encuentra en una posición bastante privilegiada, ya que se encuentra a tan solo 7 kilómetros del aeropuerto de Aspen y a unos 10 minutos del centro de la ciudad. Además, está situado junto al antiguo rancho del periodista y escritor Hunter S. Thompson, Owl Farm.
Desde el portal de venta afirman que este espacio es único y adecuado para visionarios: “Ya sea que imagine una experiencia de automovilismo privada o un refugio de lujo único, esta propiedad es una pizarra en blanco para el comprador visionario”.
La tendencia de los clubes de carreras privados, cada vez más lujosos, ha aumentado en los últimos años, por lo que es probable que ya haya algún comprador con este objetivo en mente para seguir dándole uso a esta pista de carreras.