En el mercado de los productos de limpieza en Perú existen diversas marcas que ofrecen alternativas para mantener un hogar sin polvo ni suciedad. En el caso de la cocina, es muy común que, luego de cocinar, queden restos de grasa en paredes, hornillas, campana extractora, horno u otras superficies. Esta grasa, producto de la cocción de alimentos y la evaporación de aceites, se adhiere con facilidad y, si no se limpia de inmediato, puede volverse pegajosa y difícil de eliminar con solo agua y jabón. Con el paso del tiempo, esta acumulación no solo afecta la apariencia de la cocina, sino que también puede interferir en su funcionamiento y comprometer la higiene del espacio.
Afortunadamente, no es necesario recurrir a productos químicos agresivos para combatir esta suciedad. Existen trucos caseros muy eficaces que pueden ayudarte a mantener tu cocina limpia y reluciente. Uno de los más efectivos y ecológicos se basa en un ingrediente que seguramente ya tienes en casa: el limón. Este cítrico no solo es refrescante y aromático, sino que posee propiedades desengrasantes y desinfectantes ideales para la limpieza del hogar.
Cómo usar el limón para eliminar la grasa de la cocina
El limón contiene ácido cítrico, una sustancia natural que corta la grasa, desinfecta superficies y deja un agradable aroma. Es una opción económica, ecológica y segura para limpiar áreas donde se manipulan alimentos. Esta es la manera cómo debes usarlo paso a paso:
- Corta un limón por la mitad. Utiliza un limón fresco, preferiblemente jugoso. Puedes usar ambas mitades.
- Frota el limón directamente sobre la superficie con grasa. Aplica presión para que el jugo se libere mientras lo deslizas sobre las áreas sucias: encimeras, mayólicas, cocina, horno o campana extractora.
- Deja actuar entre 5 y 10 minutos. Esto permitirá que el ácido cítrico disuelva la grasa adherida.
- Limpia con un paño húmedo o esponja. Retira los restos de grasa y jugo de limón con un paño de microfibra o una esponja. Si hay zonas difíciles, puedes repetir el proceso.
- Para grasa muy incrustada calienta el jugo de uno o dos limones y mézclalo con una cucharada de bicarbonato. Aplica sobre la superficie, deja actuar y frota suavemente.
- Enjuaga y seca. Usa un paño húmedo para retirar los residuos y luego seca con otro limpio para evitar marcas de agua.
Este método no solo elimina la grasa, sino que también deja la cocina con un aroma fresco y natural, sin necesidad de químicos agresivos.
¿Por qué es importante eliminar la grasa acumulada en la cocina?
La grasa acumulada no solo es antiestética, sino que también puede generar varios problemas tanto funcionales como sanitarios. Cuando se acumula en campanas, filtros o estufas, puede afectar el rendimiento de los electrodomésticos e incluso representar un riesgo de incendio.
Además, esa grasa pegajosa actúa como un imán para el polvo, bacterias y hongos, lo cual compromete la higiene y puede poner en riesgo la salud de quienes preparan y consumen alimentos en ese espacio.
Más consejos para mantener la cocina libre de grasa
- Limpia después de cocinar. No dejes que la grasa se enfríe y endurezca; limpiarla en el momento es más fácil.
- Usa una tapa al cocinar. Esto reduce las salpicaduras de aceite.
- Instala una campana extractora eficiente. Ayuda a atrapar vapor y grasa en el aire.
- Desengrasa filtros y rejillas regularmente. Especialmente los de la campana.
- Haz una limpieza profunda semanal. Incluye paredes, techos y rincones donde pueda acumularse grasa.
Vinagre y bicarbonato: otro truco para limpiar la cocina
Otro truco casero muy efectivo para eliminar la grasa de la cocina es la combinación de vinagre y bicarbonato de sodio. Ambos ingredientes, comunes en el hogar, actúan como desengrasantes naturales. Para usar este método, espolvorea bicarbonato sobre la superficie con grasa, luego rocía vinagre blanco hasta que haga efervescencia. Deja actuar por 5 a 10 minutos, frota con una esponja y enjuaga con un paño húmedo.
Esta mezcla disuelve la grasa pegajosa, elimina malos olores y desinfecta. Es ideal para hornillas, mayólicas y campanas extractoras, ofreciendo una alternativa económica, ecológica y segura para mantener la cocina reluciente.
