Un negocio de gigantografías ubicado en el distrito de San Juan de Lurigancho, en Lima, fue atacado con un explosivo por extorsionadores durante la madrugada de este miércoles. El incidente ocurrió a la altura del paradero 6 de la avenida Wiesse, en una zona de alta actividad comercial.
La Policía y peritos de criminalística acudieron al lugar poco después de la detonación, mientras que la Unidad de Desactivación de Explosivos (UDEX) realizó las diligencias correspondientes, de acuerdo con información de Buenos días Perú de Panamericana Televisión.
El ataque quedó grabado por las cámaras de seguridad del área. Según las imágenes revisadas por agentes policiales, un individuo que portaba casco negro llegó en motocicleta, se detuvo frente al local e inspeccionó el área durante varios minutos.
Luego, el sujeto sacó un artefacto explosivo de una bolsa blanca que llevaba bajo la casaca, lo encendió y lo colocó en la puerta principal del negocio antes de huir rápidamente del lugar.
Pocos segundos después, el explosivo detonó con fuerza, causando daños significativos tanto en la estructura de la puerta como en el concreto del piso. La onda expansiva también afectó parte del toldo superior del inmueble y expuso una caja y un medidor de agua que se encontraban cerca de la entrada.
Daños e impacto en la zona
El negocio atacado ocupa el primer piso de un edificio de cuatro plantas, donde en los pisos superiores funciona un hostal. Las imágenes posteriores al ataque muestran la puerta del local y la superficie del piso seriamente dañadas, con fragmentos de concreto, fierros expuestos y piezas de mayólica destruidas por la explosión.
También, se observa la tapa de la caja de agua abierta y restos de la detonación dispersos en la entrada, según constató un equipo periodístico de Panamericana TV.
El propietario del inmueble, quien además administra el hospedaje ubicado en los pisos superiores, declaró ante el citado medio que desconoce la razón del atentado y aclaró que el ataque habría estado dirigido exclusivamente contra el local de gigantografías, y no contra los demás establecimientos ni contra el propio alojamiento.
La modalidad de extorsión persiste
En las inmediaciones operan locales de venta de cobre, servicios gráficos, hostales, gimnasios y otros negocios, lo que, según testimonios recogidos, los convierte en blancos frecuentes de amenazas y extorsiones.
Este nuevo caso se suma a una ola de atentados similares en San Juan de Lurigancho, donde los extorsionadores suelen emplear explosivos para intimidar y exigir pagos a comerciantes. Las cámaras no lograron registrar la placa de la motocicleta ni el rostro del atacante, ya que el individuo tenía el rostro cubierto en todo momento.
El inmueble atacado sigue bajo resguardo policial en espera de novedades en la investigación, mientras los comerciantes del sector exigen mayor protección ante la persistente amenaza de la extorsión en San Juan de Lurigancho.
Canales de emergencia
El Gobierno ha puesto en funcionamiento la Central 111 de la Policía Nacional del Perú, una línea telefónica gratuita, confidencial y operativa las 24 horas. Este canal permite a la ciudadanía reportar casos de extorsión y recibir asistencia inmediata. Además, está interconectado con la Central de Emergencias 105, lo que facilita el envío de evidencias como audios o videos.
También existen otras vías para denunciar este tipo de delitos:
- Línea 1818: Servicio de emergencia específico para casos de extorsión.
- Celular 942 841 978: Número directo para reportes inmediatos.
- Comisarías: Dependencias ubicadas en cada distrito donde se pueden presentar denuncias presencialmente.
- Depincri: Divisiones policiales especializadas en investigar delitos como la extorsión.
Otros contactos útiles en situaciones de emergencia:
- Bomberos Voluntarios del Perú: 116
- Centro de Emergencia Mujer: 100
- SAMU (Atención Médica de Urgencia): 106
- Hospital Nacional de Emergencias: 113
