José Luis Ábalos, Santos Cerdán y Koldo García, quienes acompañaron a Pedro Sánchez en la etapa de las primarias del PSOE, han experimentado situaciones judiciales relacionadas con reclusión, y ahora el Partido Popular sostiene que solo resta que el propio presidente del Gobierno rinda cuentas. Este mensaje dominó la intervención de Alberto Núñez Feijóo ante unas 80.000 personas que asistieron a la concentración en el Templo de Debod de Madrid, según detalló el medio de comunicación que cubrió la jornada.
De acuerdo con los datos difundidos por la prensa, el líder del PP retó públicamente a las formaciones parlamentarias que apoyan al PSOE a definir su posición ante los casos que afectan a figuras próximas al presidente, argumentando que “el sanchismo está en la cárcel”. Feijóo subrayó que la legislatura actual debe llegar a su fin y denunció que no se tratan, a su juicio, de episodios aislados de corrupción, sino de un “sistema” que atribuyó al grupo encabezado por Sánchez. En sus palabras, “Es Ábalos, es Cerdán, es Koldo, es Tito Berni, es el fiscal condenado por delinquir. Es la mujer, es el hermano, es Gallardo, es Leire Díez, es Óscar Puente, es Salazar, es el PSOE, es Pedro Sánchez, es la corrupción”, enumeró en su discurso, conforme recogieron los medios asistentes.
La convocatoria en la capital española fue organizada por el PP en respuesta a la reciente entrada en prisión del exministro José Luis Ábalos, quien fue número tres del PSOE y figura relevante dentro del partido. El evento congregó a antiguos presidentes del gobierno como José María Aznar y Mariano Rajoy, así como a destacados presidentes autonómicos del PP, excepto los titulares de Andalucía, Extremadura y La Rioja. Según consignó la prensa, la movilización también contó con la presencia de figuras como Iván Espinosa de los Monteros, Alejo Vidal Quadras, Fernando Savater y Andrés Trapiello.
Durante la convocatoria, Feijóo insistió en que los ciudadanos manifiestan descontento ante lo que definió como un clima generalizado de corrupción y criticó fuertemente las prácticas económicas y sociales que atribuyó al ejecutivo de Sánchez. En alusión directa a los socialistas, el dirigente del PP preguntó “cuánto más van a tragar” y profetizó que verán con vergüenza este período político. Además, instó a los votantes del PSOE a marcar distancia del actual liderazgo, pidiendo que “no consientan que sus siglas se manchen del sanchismo”, según publicó la fuente consultada.
El líder del PP también se dirigió a los miembros de Vox, solicitando que no repitan los errores que, en su opinión, cometieron en el pasado y dejando claro que su principal adversario político es el propio presidente del Gobierno. De acuerdo a lo reportado por el medio, Feijóo señaló a los de Santiago Abascal la importancia de no errar en el objetivo, la prioridad y el adversario, recalcando: “Mi adversario es el presidente del Gobierno; Mi objetivo es el cambio; Mi prioridad es España”.
Respecto a Sumar, partido liderado por Yolanda Díaz, Feijóo sostuvo que no solicita dignidad a una formación que, a su entender, aceptó ser instrumento del PSOE a cambio de cuotas de poder, y advirtió sobre la existencia de un “juguete nuevo”, en referencia al apoyo recibido por socialistas de partidos independentistas. Según la información recabada, también dirigió palabras a Podemos, aludió a su trayectoria desde las protestas sociales y los calificó de “indignados de pacotilla”.
El dirigente popular mostró reservas respecto a una moción de censura, que no descarta, pero subrayó que solo la presentarán si existen garantías mínimas de éxito, apuntando a formaciones nacionalistas e independentistas como PNV y Junts, cuyos votos serían imprescindibles. Feijóo preguntó a estos partidos si su ideología justifica sostener casos de corrupción, interrogante consignado por la prensa.
Durante su intervención, Feijóo rechazó el mensaje del gobierno sobre la llegada de la ultraderecha y defendió que el momento político exige elegir entre “vergüenza o dignidad”, además de recalcar la necesidad, en sus palabras, de un “Gobierno decente” y un presidente “honesto”. La multitud interrumpió en varias ocasiones su discurso con consignas pidiendo la dimisión de Sánchez y solicitando que Feijóo asuma la presidencia, de acuerdo con la crónica.
El dirigente del PP abordó también la percepción general de frustración entre la ciudadanía, señalando que no piensa fallar en su compromiso político. Afirmó que el Partido Popular seguirá adelante con el objetivo de conseguir los votos necesarios para un cambio de gobierno y remarcó que existen alternativas viables.
Para finalizar su discurso, Feijóo enumeró las principales líneas de actuación que desarrollaría en caso de llegar a la presidencia del Gobierno. Según recogió el medio, su programa incluye una auditoría completa para esclarecer el alcance de las irregularidades denunciadas, una limpieza de las instituciones, una política de reducción de impuestos, el desbloqueo de medidas aprobadas y, como eje, la reivindicación de la democracia para que los ciudadanos puedan ejercer su libertad y decidir el futuro del país.
El evento en Madrid, celebrado tras el anuncio del ingreso en prisión de José Luis Ábalos, ha marcado así un nuevo capítulo en la confrontación entre el Partido Popular y el Ejecutivo encabezado por Pedro Sánchez, colocándose de nuevo el foco sobre las demandas de transparencia y responsabilidad en el ámbito político, según publicaron los medios que siguieron la movilización.
