La Habana, 3 may (EFE).- Unos 3.000 profesionales de la industria turística de Cuba y otros países participaron en la Feria Internacional de Turismo (FITCuba) que cerró sus puertas en medio de una anunciada “transformación” del sector, informó este sábado la prensa estatal.
El ministro cubano de Turismo, Juan Carlos García, declaró a la prensa al cierre de la feria este viernes, que esa esfera atraviesa “un proceso de transformación eliminando estructuras superiores que limitaban la gestión en la base”, según reportó el portal web oficialista Cubadebate.
“Esto aplica especialmente en áreas como la inversión extranjera, donde buscamos mayor autonomía”, agregó el titular de un sector considerado motor de la economía y fuente clave de divisas, pero que registra actualmente sus peores cifras de visitantes en años.
La venidera edición de FITCuba, en 2026, se realizará en el balneario de Varadero a 147 kilómetros de La Habana y se dedicará a Canadá coincidiendo con el 80 aniversario de las relaciones entre ambos países, adelantó el ministro. China concentró todas las miradas al ser el país invitado este año.
Cuba no se ha recuperado del golpe de la pandemia, aunque el descenso de turistas comenzó desde antes de la crisis sanitaria. Tras el récord de 2017, con 4,7 millones de vacacionistas, siguieron dos años a la baja: 4,2 y 4,6 millones en 2018 y 2019.
Con las restricciones de la Covid-19, en 2020 el país recibió poco más de un millón de turistas, en 2021 fueron apenas medio millón. A partir de entonces remontaron ligeramente, con 1,6 millones en 2022 y 2,4 millones en 2023.
Pero 2024 supuso un nuevo tropiezo con 2,2 millones de visitantes, la isla registró su peor cifra en 17 años (sin contar 2020 y 2021). El presente ejercicio arrancó aún por debajo, con un descenso interanual del 30 %, según la Oficina Nacional de Estadística e Información.
Con las cifras de turistas obtenidas hasta marzo parece difícil que se alcance el objetivo gubernamental de 2,6 millones de visitantes este año.
El economista José Luis Perelló, especializado en turismo en Cuba, aseguró recientemente en una entrevista a EFE que el país se encontraba en plena “década perdida” y que no volvería a alcanzar sus máximos históricos hasta 2030.
Las razones de esta situación son múltiples. Los expertos, además de las sanciones, hablan de la competencia de destinos equivalentes, la grave crisis económica cubana, los frecuentes apagones diarios, los problemas en el servicio hotelero, la falta de combustible y la notable reducción de los vuelos a la isla en los últimos meses. EFE