Los ministros de Exteriores de Francia, Alemania y Reino Unido han condenado este viernes los ataques del Ejército de Israel contra una delegación negociadora del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) en la capital de Qatar, Doha, y han remarcado que este bombardeo pone en riesgo un acuerdo de alto el fuego para la Franja de Gaza.
«Condenamos los ataques de Israel en Doha del 9 de septiembre, que violan la soberanía de Qatar y amenazan con una mayor escalada en la región. Esta acción supone un grave riesgo para el logro de un acuerdo negociado que garantizaría la liberación de todos los rehenes restantes y el fin de la guerra en Gaza», reza un comunicado conjunto.
Tres días después de los ataques, los jefes de la diplomacia de los tres países europeos, que han expresado su solidaridad con las autoridades qataríes, han apoyado «plenamente el papel fundamental que sigue desempeñando en los esfuerzos de mediación entre Israel y Hamás, junto con Egipto y Estados Unidos». «Instamos a las partes a actuar con moderación y aprovechar la oportunidad para la paz», han agregado.
En este sentido, han recalcado que «la prioridad debe seguir siendo alcanzar un alto el fuego permanente, la liberación de todos los rehenes restantes y el envío de ayuda a Gaza para frenar la hambruna». Así, han exigido «urgentemente el ceso inmediato de las operaciones militares israelíes» en la ciudad de Gaza.
«Están causando desplazamientos masivos de civiles, víctimas civiles, y la destrucción de infraestructura crítica. Exigimos a la ONU y a las ONG humanitarias que puedan trabajar de forma segura y a gran escala en toda la Franja, incluido el norte», han declarado, antes de reiterar su condena «inequívoca» de los atroces crímenes cometidos por Hamás».
El Ejército de Israel confirmó su responsabilidad en un «bombardeo de precisión» contra «la cúpula de la organización terrorista Hamás» en Doha mientras que estaban realizando consultas para un alto el fuego en Gaza. Sin embargo, Hamás dijo que cinco de sus miembros murieron en el ataque, si bien sus altos cargos –miembros de la delegación negociadora– sobrevivieron a este bombardeo. Un policía qatarí también falleció.