Personal de la Policía Vial de la provincia de Buenos Aires interceptó a un hombre de 38 años sobre la Ruta Nacional 226 durante la madrugada del jueves pasado. El individuo manejaba una camioneta Jeep por el kilómetro 64,5, cerca de la ciudad de Balcarce. Los efectivos detectaron trayectorias irregulares y detuvieron la marcha del automovilista. El test de alcoholemia arrojó un mensaje de “fuera de rango” ante la elevada concentración de sustancias en el organismo del sujeto.
Cómo fue el momento en que un conductor ebrio saturó el alcoholímetro
El dispositivo de medición utilizado por las autoridades arrojó un mensaje inusual tras la soplada del implicado: «fuera de rango“. Esta leyenda apareció en la pantalla del equipo debido a que el sujeto consumió una cantidad de sustancias que superó la capacidad máxima de detección del aparato.

El test de alcoholemia sirve para determinar la concentración de alcohol por litro de sangre, pero en esta oportunidad el volumen resultó tan elevado que el sensor electrónico no logró establecer una cifra numérica precisa. La situación confirmó las sospechas de los efectivos policiales tras la observación directa del comportamiento del automovilista en la ruta.
Desde el Ministerio de Transporte de la provincia de Buenos Aires explicaron que este fenómeno indica una presencia alcohólica ampliamente superior al límite permitido. La normativa actual establece la Ley de Alcohol Cero en todo el territorio bonaerense. El chofer interceptado detuvo la marcha luego de que los agentes notaron una trayectoria en zigzag a alta velocidad.
Al descender del habitáculo, el hombre manifestó un estado de embriaguez evidente. El reporte oficial detalló que el infractor no poseía la capacidad de modular palabras con claridad. Los uniformados también registraron serias dificultades motrices cuando el sujeto intentó bajar de la camioneta por sus propios medios.

Consecuencias legales y sanciones económicas
La patrulla vial labró la infracción correspondiente de manera inmediata ante la gravedad del hecho. Las autoridades procedieron a la retención del vehículo y retiraron la documentación del chofer para impedir la continuidad de su trayecto.
El protocolo de seguridad vial exige que el vehículo permanezca inmovilizado hasta la llegada de un allegado que cumpla con los requisitos legales de sobriedad. El hombre de 38 años quedó a disposición del proceso judicial pertinente por violar las normas de circulación vigentes.

Las sanciones económicas para este tipo de faltas graves alcanzan sumas considerables en la actualidad. Según datos de la Secretaría de Transporte nacional, una multa por resultado positivo en controles de este tipo ronda los $1.750.000. Este monto definitivo depende de la jurisdicción específica y del valor actualizado de las Unidades Fijas en cada distrito.
La sanción administrativa incluye la prohibición para circular por tiempo determinado. En diversos casos, la ley exige que el infractor realice un curso de reeducación vial antes de la recuperación de su licencia de conducir física. El proceso busca sensibilizar sobre los riesgos de la conducción bajo efectos de sustancias tóxicas.
Este contenido fue producido por un equipo de LA NACION con la asistencia de la IA.
