Los gobiernos de Venezuela, Bolivia y Cuba han mostrado este martes su apoyo a la expresidenta de Argentina Cristina Fernández, después de que el Supremo haya ratificado la condena de seis años de prisión en su contra por corrupción, en lo que han condenado como un intento para «socavar a la izquierda».
El Ministerio de Exteriores de Venezuela ha emitido un comunicado en el que «denuncia con firmeza el golpe político y judicial contra la» exmandataria argentina que debe entregarse a las autoridades antes del 19 de junio, lamentando que está siendo «víctima de una persecución brutal impulsada desde un poder judicial subordinado al proyecto autoritario de (el actual presidente) Javier Milei».
Por su parte, el presidente de Bolivia, Luis Arce, ha manifestado su «firme apoyo y solidaridad» con la actual líder del Partido Justicialista (PJ), en un mensaje en su cuenta de la red social X, donde ha acusado a las autoridades argentinas de hacer «un evidente uso de la justicia como herramienta para socavar las fuerzas de izquierda y del campo nacional popular».
Mientras, su homólogo cubano, Miguel Díaz-Canel, ha empleado la misma plataforma para respaldar a Fernández «ante (un) episodio de judicialización política». «Una vez más se utiliza la justicia con motivaciones políticas como instrumento de la derecha contra referentes progresistas de la región», ha agregado.