Donald Trump firmó este jueves resoluciones que anulan las normas de California sobre autos eléctricos y que perjudican el mercado de Tesla, la empresa de Elon Musk. La decisión revierte una autorización de la Agencia de Protección Ambiental otorgada durante el gobierno de Joe Biden y bloquea la eliminación progresiva de vehículos a combustión interna hasta 2035.
Trump anuló las reglas de autos eléctricos en California
Según informó The New York Times, el presidente republicano firmó las resoluciones este jueves en la Casa Blanca. Las normas habían sido aprobadas por el Congreso en mayo, con respaldo del Partido Republicano. Esta acción impide que California prohíba la venta de autos nuevos a gasolina.
En estas nuevas resoluciones, el presidente Trump revocó exenciones ambientales vigentes desde 1970 que eliminan la capacidad de California para fijar límites de emisión más estrictos que los federales.
Cada una consiste en:
- La primera resolución frena la meta de que el 100% de autos nuevos sean eléctricos para 2035.
- La segunda resolución bloquea la norma que exigía que la mitad de los camiones nuevos también funcionen con electricidad.
- La tercera resolución suprime los límites impuestos por el estado sobre las emisiones de óxidos de nitrógeno.
En un acto en la Casa Blanca, Trump calificó el plan de California como un “desastre” y dijo que “prácticamente aboliría el motor de combustión interna, que la mayoría de la gente prefiere”.
Elon Musk y el impacto para los autos eléctricos
Las resoluciones firmadas por Trump representan un revés para Tesla, ya que California es uno de los principales mercados de vehículos eléctricos. Con casi 40 millones de habitantes, el Estado Dorado influye en el 40% del mercado automotor de EE.UU. Mientras tanto, 11 estados planeaban imitar las reglas de California.
Ahora, Musk, a pesar de haberse disculpado con Trump, pierde respaldo normativo clave para sus modelos eléctricos, por lo que se verá obligado a replantear estrategias luego de este nuevo golpe del republicano. Según The New York Times, eso encarece los costos y complica el cumplimiento de metas climáticas.
California prepara una respuesta judicial y ejecutiva
En contrapartida, el fiscal Rob Bonta anunció una demanda contra las resoluciones. Mientras tanto, el gobernador Newsom planea firmar una orden ejecutiva para mantener los incentivos a la movilidad eléctrica con subsidios para fabricantes comprometidos con la transición.
Newsom declaró que la decisión federal “destruye nuestro aire limpio y la competitividad global”. Además, indicó que el estado desarrollará mecanismos regulatorios alternativos para sortear el bloqueo impuesto por el Congreso.
Por otro lado, el eje legal de la demanda de Bonta será que el Congreso usó ilegalmente la Ley de Revisión del Congreso, de 1996, para anular las exenciones. Esta ley permite revertir reglas recientes del poder ejecutivo, pero no fue pensada para exenciones.
“Es un uso completamente inapropiado de esa ley”, explicó Bonta, quien también manifestó que la contaminación por autos a gasolina se vincula con enfermedades respiratorias, cardíacas y cáncer.
Apoyo del sector petrolero y críticas del ambientalismo
La industria de combustibles celebró la medida. John B. Hess, CEO de Hess Corporation, estuvo presente en la firma de Trump. Líderes republicanos, del transporte y del petróleo respaldaron la decisión.
“Todos coincidían en que estas metas de ventas de autos eléctricos eran inalcanzables y totalmente irreales”, dijo John Bozzella, CEO de Alliance for Automotive Innovation. “Los consumidores no quieren que el gobierno les diga qué auto comprar”, agregó.
Por su parte, Chris Spear, de la Asociación de Camioneros, dijo que “el plan era una carrera loca hacia cero”. Para él, el cronograma fijado para electrificar camiones no contemplaba la infraestructura real de carga en rutas de larga distancia ni las limitaciones operativas de los nuevos modelos.