Un hermano del hombre que murió presuntamente asesinado en una chabola en es Carnatge (Palma) que luego fue incendiada, supuestamente, para ocultar el crimen, lo ha definido como una persona muy generosa «que se quitaba su camisa para cubrir a otro y que dejaba de comer para que otro comiera».
El hombre ha comparecido como testigo en la tercera sesión del juicio con jurado que se celebra en la Audiencia Provincial de Palma.
El hermano se ha referido a la víctima como una persona «muy trabajadora», hasta que cayó en el alcoholismo, y la que «le gustaba la música y reírse».
En relación al acusado de la muerte de su hermano, que se enfrenta a 20 años de cárcel por asesinato, el testigo ha señalado que sólo lo vio una vez, durante una fiesta de cumpleaños en la que la víctima se lo presentó como su novio. «Se rió, me dio la mano, se encendió un cigarro y se marchó. Ya no lo volví a ver», ha explicado, recordando que presentaba un aspecto «un poco descuidado».
Los hechos se remontan a la madrugada del 25 de enero de 2022, momento en que se tuvo conocimiento de la muerte de un hombre en el interior de una chabola incendiada en es Carnatge (Palma).
Aunque inicialmente la muerte parecía haberse producido de forma accidental por la mala combustión de una estufa, tras confirmarse la muerte violenta la investigación culminó con la detención, en febrero de 2023, de un hombre de 32 años y origen español y que permanece desde entonces en prisión y para quien la fiscal pide 20 años de prisión por asesinato.