Por primera vez, la historia de Frida Kahlo debutarán en la gran pantalla como película animada. Esta producción, bien recibida internacionalmente, llegará a los cines de América Latina el 14 de agosto de 2025, a poco más de 70 años de su fallecimiento.
La cinta, dirigida por Karine Vézina y André Kadi, se inspira en los libros infantiles de Sophie Faucher y en las ilustraciones de Cara Carmina, y está pensada para sumergir al público en la infancia de uno de los personajes más emblemáticos del arte mexicano. El relato abarca la etapa en que Frida enfrenta la poliomielitis, descubre su creatividad y transita emociones profundas en el colorido entorno de Coyoacán.
La animación destaca por su riqueza en colores, texturas y simbolismos, trazando un recorrido visual que va desde las cartas personales y cuadernos de la artista hasta el bullicio de los mercados de Ciudad de México y la intimidad de la Casa Azul.
La banda sonora cuenta con la participación de Olivia Ruiz, quien presta su voz a la protagonista y compone el tema principal, mientras que la música original es obra de Laetitia Pansanel-Garric. El proyecto ha contado con el apoyo y la colaboración de Cristina Kahlo, sobrina nieta de la pintora, y la implicación directa del Museo Frida Kahlo.
En las primeras proyecciones de la película, tanto en el Festival Internacional de Cine de Morelia como en el Festival Internacional de Cine de Animación de Annecy (Francia), la recepción del público fue altamente positiva.
Datos universales sobre la vida de de Frida Khalo
Frida Kahlo solía afirmar que había nacido en 1910, aunque nació en 1907, para asociar su historia personal al inicio de la Revolución Mexicana. Aunque se convirtió en ícono de la cultura mexicana y de la raíz indígena, su ascendencia era diversa: “Su padre nació como Carl Wilhelm Kahlo en Alemania, y su madre, Matilde Calderón, tenía ascendencia indígena mexicana y española.”
Frida también dejó huella en el mundo del arte con obras como “Raíces”, que en mayo de 2006 alcanzó los 5,6 millones de dólares en una subasta, marcando un récord para una pieza latinoamericana.
Detrás de su carrera artística, se encuentra un episodio decisivo: el accidente casi fatal sufrido a los 18 años, a raíz del cual dejó la medicina y se volcó a la pintura. Durante la larga recuperación, su familia la apoyó para facilitarle el trabajo: “Su padre le prestó sus pantalones de aceite y pinceles, mientras que su madre encargó un caballete especial para que Kahlo pudiera pintar en su cama de hospital, e instaló un espejo en el dosel.”
Aunque logró cierto reconocimiento en vida, la fama de Kahlo llegó con fuerza global solo después de su muerte en 1954. Unos días antes de fallecer, escribió: “Espero que la salida sea alegre -y espero no volver nunca- Frida”. En vida fue sobre todo conocida como la esposa de Rivera, pero hoy el orden de los nombres se ha invertido y Frida ocupa el lugar central en la memoria cultural.
El interés por su vida y obra ha impulsado la publicación de múltiples biografías, artículos, y filmes. Sus vivencias han llegado antes al cine en producciones como “Frida, naturaleza viva” (1983) y “Frida” (2002), esta última protagonizada por Salma Hayek, que recaudó más de 50 millones de dólares y obtuvo dos premios Óscar. Ahora, con “Hola Frida”, una nueva generación se acercará a la artista a través del cine animado, redescubriendo su universo creativo, su identidad y su resiliencia desde la mirada de una niña.