La ONG Human Rights Watch (HRW) ha alertado este lunes de que el despliegue militar en la capital de Estados Unidos, Washington DC, es «injustificado y peligroso», después de que el inquilino de la Casa Blanca, Donald Trump, tomara esta decisión en un esfuerzo por «restablecer la ley, el orden y la seguridad pública».
«Involucrar a las fuerzas militares en la aplicación de la ley civil es peligroso e injustificado. Las medidas de la Administración Trump para desplegar fuerzas militares en ciudades con poblaciones mayoritariamente racializadas, como Los Ángeles en junio y ahora Washington DC, exacerban el riesgo de violencia», ha declarado la directora del HRW para Estados Unidos, Tanya Greene.
Asimismo, ha hecho hincapié en que este despliegue «cuesta millones de dólares que podrían destinarse a servicios básicos, como alimentos y vivienda asequible, que muchas personas necesitan desesperadamente».
«Como hemos visto en todo el mundo, la toma de control militar de las fuerzas del orden locales es un presagio de autoritarismo. Los líderes de Estados Unidos y del mundo entero deben condenar estas acciones, que constituyen una amenaza para los derechos de todos», ha agregado.
HRW ha subrayado que las declaraciones de Trump tienen lugar cuando los índices de delincuencia en Washington DC «llevan años disminuyendo y el gobierno del distrito no ha solicitado la intervención militar».