
Dormir mal afecta todo: el humor, el trabajo y hasta las relaciones personales. La buena noticia es que existen alimentos y bebidas naturales que pueden ayudarte a descansar mejor, sin necesidad de recurrir a medicamentos. Cambiar lo que cenas puede marcar la diferencia y lograr ese sueño profundo que tanto necesitas.
Investigadores de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y el Instituto Nacional de Salud Pública encontraron que lo que comes en la noche influye mucho en cómo duermes. Algunos alimentos ayudan a tu cerebro a producir las sustancias necesarias para conciliar el sueño. Entre ellos se encuentran los lácteos, algunas frutas, los cereales integrales y los frutos secos.
El poder de la leche tibia y las infusiones para dormir
Un vaso de leche tibia antes de dormir se ha usado por generaciones para ayudar a relajarse. Tiene triptófano, un nutriente que ayuda a tu cuerpo a producir serotonina y melatonina, hormonas claves para dormir bien, de acuerdo con la UNAM. Tomar leche por la noche puede ayudarte a relajarte y reducir el estrés.
Las infusiones, como la manzanilla y la valeriana, también son buenas opciones. Un té de estas hierbas, tomado con calma, puede calmar tu mente y ayudarte a desconectarte del ajetreo del día. Solo necesitas unos minutos antes de dormir para disfrutar de sus efectos relajantes.
Las legumbres y los cereales integrales contienen magnesio y vitamina B6, nutrientes que ayudan al cerebro a relajarse y descansar. Las almendras y las nueces tienen, además, melatonina natural. Comer un puñado pequeño en la cena o como colación nocturna puede favorecer el sueño.
El plátano sobresale porque contiene potasio y vitamina B6, sustancias que ayudan en la producción de serotonina. Comer un plátano por la noche puede convertirse en una rutina sencilla y efectiva para dormir mejor.
Agregar un poco de miel natural a la leche o a una infusión ayuda al cuerpo a absorber el triptófano, lo que te ayuda a relajarte. Esta mezcla es fácil, económica y natural.

Paso a paso para mejorar tu sueño
1. Cena ligero con alimentos ricos en triptófano, como pollo, huevo o lácteos.
2. Media hora antes de dormir, toma una infusión de manzanilla o valeriana.
3. Elige nueces, almendras o una fruta, en vez de dulces o pan.
4. Evita cenar copiosamente y deja la cafeína al menos cuatro horas antes de descansar.
5. Cierra el día con un vaso de leche tibia y un toque de miel.

Tip extra: Trata de dormir y cenar siempre a la misma hora. Así ayudas a que tu cuerpo mantenga un ritmo y puedas aprovechar al máximo los beneficios de estos alimentos.
Descansar bien no tiene por qué ser complicado. Con algunos ajustes en tu dieta y tu rutina nocturna, puedes mejorar la calidad de tu sueño de manera natural.
