Al advertir sobre el posible impacto en la estabilidad internacional, Ismail Baqaei, portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Irán, explicó que la restricción estadounidense sobre el espacio aéreo de Venezuela representa un riesgo significativo para el sistema global de aviación y para la paz mundial. De acuerdo con la agencia oficial IRNA, el funcionario indicó que el cierre completo anunciado por el presidente Donald Trump constituye, según el análisis iraní, una amenaza sin comparaciones anteriores, con potenciales repercusiones negativas que trascienden la región sudamericana y afectan la seguridad internacional.
Tal como informó IRNA, la respuesta del Gobierno iraní se formalizó poco después de que Trump comunicara que el espacio aéreo “sobre Venezuela y sus alrededores” quedaría completamente cerrado. Este anuncio, realizado a través de la red social Truth Social, se enmarca en una estrategia anunciada por el mandatario estadounidense, en la que la clausura del tránsito aéreo podría servir como preludio a una operación militar terrestre con el objetivo de intervenir contra presuntas redes de narcotráfico.
El portavoz iraní subrayó que esta medida infringe principios internacionales, ya que contradice normativas y tratados referidos a la aviación civil. Según recogió IRNA, Baqaei describió la disposición como “arbitraria”, haciendo hincapié en que vulnera la soberanía y la integridad territorial de Venezuela. En ese sentido, el Gobierno iraní expresó su completo rechazo a cualquier acto que considere “provocador e ilegal”, reiterando su solidaridad con la administración de Nicolás Maduro.
El medio IRNA consignó que Trump manifestó su intención de reforzar la presión sobre Venezuela en la misma semana en que ordenó una acumulación de tropas estadounidenses en zonas limítrofes del país sudamericano. En sus declaraciones difundidas, el presidente estadounidense se dirigió tanto a aerolíneas y pilotos como a supuestos narcotraficantes y traficantes de personas, advirtiendo que el espacio aéreo venezolano permanecería cerrado en su totalidad. IRNA destacó el tono enfático de este mensaje y la determinación de Washington al delinear líneas rojas en la región.
De acuerdo con las declaraciones oficiales recogidas por IRNA, las autoridades de Teherán urgieron a la comunidad internacional a intervenir para preservar los principios del derecho internacional y garantizar la convivencia pacífica. Baqaei subrayó que el cierre unilateral del espacio aéreo podría tener consecuencias graves no solamente en lo político, sino también en aspectos prácticos relacionados con el transporte aéreo, ya que podría afectar la circulación de vuelos comerciales y de ayuda humanitaria que transitan por la región.
El Gobierno iraní manifestó particular preocupación ante la posible escalada de tensiones en América del Sur como consecuencia de este tipo de decisiones unilaterales. Según reportó IRNA, la administración de Teherán instó al respeto de las normativas emanadas de organismos multilaterales en materia de navegación aérea y reiteró que la resolución de conflictos debe regirse por mecanismos internacionales establecidos y no por disposiciones adoptadas de forma individual por un solo país.
En su seguimiento de la crisis, IRNA expuso que la reacción iraní se suma al malestar que la medida estadounidense generó en distintos gobiernos y organizaciones ligadas tanto al transporte aéreo como a la defensa de los derechos humanos. La agencia contextualizó la decisión dentro de una serie de movimientos militares y diplomáticos recientes de Washington, lo que contribuyó a aumentar la atención internacional sobre el área.
El pronunciamiento iraní incluyó un llamado a la protección de la integridad territorial de todas las naciones potencialmente afectadas. IRNA detalló que el Gobierno de Irán reiteró su compromiso continuo de monitorear el desarrollo de los acontecimientos, con el objetivo de movilizar a la comunidad internacional en defensa del cumplimiento normativo y la estabilidad regional.
