Irán no asistirá, pese a ser uno de los países invitados, a la cumbre prevista para este lunes en la ciudad egipcia de Sharm el Sheij para la firma del acuerdo de alto el fuego que permitirá la liberación de los rehenes israelíes retenidos en la Franja de Gaza a cambio de presos palestinos.
«Aunque estamos a favor del compromiso diplomático, ni el presidente (Masud) Pezeshkian ni yo podemos colaborar con homólogos que han atacado al pueblo iraní y siguen amenazándonos y sancionándonos», ha declarado el ministro de Exteriores iraní, Abbas Araqchi, a través de la red social X.
Con todo, ha expresado que su país «agradece la invitación del presidente (egipcio, Abdelfatá) al Sisi para asistir a la cumbre» y que «acoge con satisfacción cualquier iniciativa que ponga fin al genocidio de Israel en Gaza y garantice la expulsión de las fuerzas de ocupación».
«Los palestinos tienen pleno derecho a garantizar su derecho fundamental a la autodeterminación, y todos los Estados siguen estando obligados, más que nunca, a ayudarles en su causa legítima y legal», ha subrayado, apelando a los países asistentes al encuentro.
Asimismo, Araqchi ha afirmado que «Irán siempre ha sido, y siempre seguirá siendo, una fuerza vital para la paz en la región». «A diferencia del régimen genocida israelí, Irán no busca guerras eternas –especialmente por cuenta de sus supuestos aliados–, sino la paz, la prosperidad y la cooperación eternas», ha agregado.
La decisión del Ejecutivo iraní ha sido tomada tras una reunión del Consejo de Ministros presidida por Pezeshkian y con presencia del propio Araqchi, según ha recogido la agencia de noticias oficial iraní, IRNA.
Así, finalmente Teherán no tendrá representación en la cita, al igual que el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás), que ha explicado que no estarán en Sharm el Sheij a través de las declaraciones de su portavoz Husam Badran.
Las autoridades egipcias anunciaron el sábado que más de una veintena de países están invitados a asistir a la cumbre del lunes en Sharm el Sheij. La cita estará copresidida por el presidente egipcio, Abdelfatá al Sisi, y el presidente estadounidense, Donald Trump.