El Gobierno de Israel ha afirmado este jueves que los activistas de la Global Sumud Flotilla están siendo trasladados de forma «segura» a Israel de cara a iniciar las labores para su deportación, tras la interceptación en aguas internacionales de los barcos que participaban en la misión, que buscaba entregar ayuda humanitaria a la Franja de Gaza.
«Los pasajeros de la Hamás-Sumud en sus yates están en camino de forma segura y pacífica a Israel, donde se iniciarán los procesos para su deportación a Europa», ha dicho el Ministerio de Exteriores israelí en su cuenta en la red social X, donde ha asegurado que todos ellos «se encuentran bien» tras la interceptación de sus embarcaciones.
La Global Sumud Flotilla ha denunciado durante las últimas horas el inicio de las interceptaciones por parte del Ejército de Israel de las embarcaciones que componen la iniciativa, antes de asegurar que las comunicaciones y las emisiones en directo desde las mismas fueron «cortadas» por las tropas israelíes antes de los abordajes.
«Es un ataque ilegal contra activistas desarmados. Pedimos a todos los gobiernos e instituciones internacionales que reclamen que se garantice su seguridad y su liberación inmediata», ha afirmado en su cuenta en Instagram, donde ha abogado por «desafiar la normalidad genocida con desobediencia civil». «Detengan el genocidio», ha zanjado.
Las múltiples intervenciones del Ejército de Israel se han producido después de que lanzase una advertencia radiofónica en la que pedían a los integrantes de las embarcaciones que cambiaran el rumbo de su navegación. «Se acercan a una zona de bloqueo. Si desean entregar ayuda a Gaza, pueden hacerlo a través de los canales establecidos», dijo.
Los activistas ya rechazaron hace días la propuesta de Israel de ir a puertos israelíes para dejar allí la ayuda de cara a que fuera enviada desde ahí a Gaza, sometida a una ofensiva militar israelí en respuesta a los ataques del 7 de octubre de 2023 y objetivo de un firme bloqueo por parte de Israel, que ha impuesto múltiples limitaciones a la entrada y entrega de ayuda humanitaria en el enclave palestino.
La ofensiva israelí contra la Franja, ha dejado hasta la fecha más de 66.100 palestinos muertos –entre ellos 455, incluidos 151 niños, por hambre y desnutrición– según las autoridades gazatíes, controladas por Hamás, en medio de las críticas internacionales sobre las acciones del Ejército de Israel, especialmente en torno al bloqueo a la entrega de ayuda, que ha llevado a que el norte de Gaza haya sido declarado como zona de hambruna.