La partida de 8.700 millones de dólares (7.500 millones de euros) que el Congreso de Estados Unidos aprobó en abril de 2024, destinada como ayuda para Israel, introdujo una dotación de 5.200 millones de dólares dedicada específicamente a fortalecer los sistemas de defensa aérea israelíes, según detalló el medio. Como parte de este respaldo financiero, el Ministerio de Defensa de Israel concretó un acuerdo con la empresa local Rafael para ampliar la producción en serie del sistema antiaéreo conocido como ‘Cúpula de Hierro’. De acuerdo con el reporte, Amir Baram, director general de la cartera ministerial, firmó el contrato en Tel Aviv, acompañado por funcionarios del sector defensa.
Según informó el medio, el contrato, producto de negociaciones extensas, establece que Rafael suministrará una cantidad significativa de interceptores diseñados para reforzar la operatividad de la ‘Cúpula de Hierro’. Esta adquisición busca incrementar la capacidad de respuesta ante posibles ataques que se originen en diferentes frentes regionales. El Ministerio de Defensa, a través de su titular Israel Katz, resaltó la importancia estratégica de este paso para mantener y avanzar en la protección del espacio aéreo nacional.
El sistema ‘Cúpula de Hierro’ ha sido desarrollado y gestionado por la empresa Rafael, una firma israelí especializada en tecnologías de defensa. De acuerdo con declaraciones de Israel Katz recogidas por el medio, el sistema se ha consolidado como una de las herramientas más efectivas para la defensa aérea reciente del país. Katz indicó: “A lo largo de los años, y en particular durante las recientes operaciones militares, ha protegido el espacio aéreo de nuestra nación e interceptado con éxito miles de amenazas procedentes de Gaza, Líbano y otros escenarios, sirviendo como escudo protector para los ciudadanos israelíes”.
El acto de la firma contó con la presencia de varias autoridades ligadas al área militar y de defensa. Según reportó el medio, Amir Baram, al frente de las negociaciones, rubricó el contrato junto a representantes de Rafael y del Ministerio de Defensa, lo que refuerza el compromiso gubernamental con el desarrollo y el mantenimiento operativo de este sistema antiaéreo.
Como detalló el Ministerio de Defensa, la firma de este contrato implica un avance estratégico relevante para el país que permite consolidar la defensa frente a adversarios regionales. Israel Katz afirmó: “Este histórico contrato representa un avance estratégico que reforzará significativamente nuestras capacidades de defensa aérea contra adversarios que persisten en sus esfuerzos por atentar contra la seguridad de Israel”. La adquisición prioriza la protección de la infraestructura nacional y la seguridad de la población civil ante la amenaza de ataques con misiles o cohetes provenientes de grupos armados en los territorios de Gaza y el sur de Líbano, así como de otros contextos potenciales.
El acuerdo trasciende el ámbito técnico-militar, ya que también destaca la cooperación entre Israel y Estados Unidos. Según consignó el medio, las autoridades israelíes consideran que la colaboración con Washington se refleja en proyectos conjuntos como la ‘Cúpula de Hierro’, cuyo desarrollo ha contado tanto con inversiones directas como con transferencia tecnológica estadounidense. El ministro Katz valoró este aspecto al asegurar que “este acuerdo constituye una prueba más de la solidez de nuestra alianza con Estados Unidos y de la sólida cooperación entre nuestras naciones. Juntos, continuaremos desarrollando y mejorando los sistemas de defensa aérea más avanzados del mundo, garantizando así la seguridad de nuestro Estado y la superioridad estratégica de Israel durante las próximas décadas”.
El contrato firmado con Rafael no sólo permitirá una expansión significativa del número de interceptores, sino que también se enmarca en un programa de modernización y actualización tecnológica de los sistemas defensivos. El propósito consiste en mantener la eficacia del sistema ante la evolución en el tipo, alcance y cantidad de amenazas que Israel enfrenta en el entorno regional, según reflejó el reporte.
Los recursos comprometidos en esta operación derivan directamente del paquete de ayuda aprobado por el legislativo estadounidense. Esta financiación prevé que los sistemas de defensa aérea, incluida la ‘Cúpula de Hierro’, puedan responder a escenarios de conflicto múltiple y de alta intensidad, contexto que Israel considera como parte de su entorno estratégico.
El acuerdo firmado se inscribe en una iniciativa gubernamental israelí que destina recursos a prioridades de defensa, promoviendo la investigación, el desarrollo y la adquisición de nuevas capacidades. Rafael, como contratista principal, asumirá la tarea de fabricar y entregar los nuevos interceptores en un calendario que permita abastecer los requerimientos operativos del Ministerio de Defensa, según agregó el medio. El sistema, que comenzó su despliegue hace más de una década, ha recibido continuas mejoras derivadas tanto de la experiencia en combate como de programas de inversión estatal y bilateral.
La opinión oficial remarca que el refuerzo de la ‘Cúpula de Hierro’ impacta de forma directa en la confianza de la población israelí y en la capacidad del Estado de disuadir ataques. El Ministerio de Defensa evalúa regularmente las capacidades de este sistema frente a la aparición de nuevas tecnologías ofensivas empleadas por adversarios regionales. Tal como reportó el medio, estos factores han impulsado tanto la revisión de las necesidades operativas como la priorización de la modernización de los equipos militares.
La operación recientemente concretada constituye uno de los mayores compromisos de compra de interceptores en la historia reciente de Israel, de acuerdo con la información difundida. El refuerzo de la ‘Cúpula de Hierro’ se visualiza como una medida para consolidar la autonomía y la resiliencia del país frente a amenazas aéreas de diversa índole. Según sostuvo el ministro Israel Katz, los sistemas de defensa aérea “garantizan la seguridad de nuestro Estado y la superioridad estratégica de Israel durante las próximas décadas”.
