Jason Momoa, reconocido mundialmente por su participación en exitosas producciones de Hollywood, sorprendió recientemente al revelar la profunda admiración que siente por tres artistas históricos del cine: Jack Nicholson, Marlon Brando y Daniel Day-Lewis.
En una charla con Rotten Tomatoes, citada por Indie Hoy, el actor originario de Hawái ofreció detalles poco conocidos sobre sus influencias, dejando ver su pasión por el arte dramático más allá de los géneros que transita habitualmente.
Aunque entre sus roles más celebrados se encuentran personajes de acción y ciencia ficción, como Aquaman en el universo de DC Comics y Khal Drogo en la serie Game of Thrones, Momoa explicó que las interpretaciones que más lo han marcado pertenecen a otro tipo de cine, uno orientado hacia la complejidad emocional y el riesgo interpretativo.
De acuerdo con lo señalado, el impacto de los grandes clásicos en su formación es innegable y se traduce en una búsqueda permanente de profundidad actoral.
Jack Nicholson: un referente indiscutible desde sus inicios
El primero en la lista de artistas admirados por Momoa es Jack Nicholson, uno de los rostros más carismáticos y versátiles del séptimo arte. Nacido en Estados Unidos en 1937, es conocido por su capacidad de encarnar personajes de psicología compleja, que van desde la ironía desafiante hasta la locura más perturbadora.
Entre sus filmes destacados, se encuentran El resplandor, dirigida por Stanley Kubrick, donde interpreta a un escritor que desciende hacia la locura, y Alguien voló sobre el nido del cuco, donde da vida a Randle McMurphy, rol por el cual obtuvo uno de sus tres premios Oscar.
Momoa manifestó una devoción absoluta por la totalidad de la obra de Nicholson, y destacó especialmente su sentido del humor, intensidad y carisma. El actor hawaiano mencionó títulos menos difundidos pero igualmente influyentes, como Mi vida es mi vida, reafirmando así el alcance y diversidad del legado del actor estadounidense.
La admiración de Momoa se fundamenta, además, en la autenticidad y magnetismo únicos que Nicholson ha demostrado en cada uno de sus proyectos, elementos que se convirtieron en referentes para las nuevas generaciones.
Marlon Brando: pionero de una nueva época interpretativa
El segundo gran referente citado por Momoa es Marlon Brando, considerado uno de los pioneros en el arte de la interpretación naturalista y emocionalmente intensa.
Brando, nacido en 1924, destacó por su capacidad de romper con los estereotipos actorales de la época. Uno de sus papeles más icónicos, y el preferido de Momoa, es Stanley Kowalski en Un tranvía llamado deseo (1951), adaptación al cine de la obra de Tennessee Williams, donde el actor condujo la actuación a una nueva dimensión de realismo.
También es recordado por otros títulos, como El Padrino y Apocalypse Now, películas emblemáticas que lo consolidaron como una influencia permanente en la historia cinematográfica.
Según la entrevista citada, el propio Momoa resaltó la fuerza y la profundidad de Brando en pantalla, señalando que su desempeño en Un tranvía llamado deseo constituye uno de los puntos más altos de su carrera.
Para Momoa, el compromiso emocional de Brando y su capacidad para abordar personajes complejos marcan diferencias insoslayables respecto a otros intérpretes.
Daniel Day-Lewis: perfeccionismo y metamorfosis en la actuación
El tercer actor admirado por Jason Momoa es Daniel Day-Lewis, célebre por su exigente preparación y por abordar cada papel como un nuevo desafío personal.
Nacido en Londres en 1957 y ganador de tres premios Oscar, Day-Lewis se distingue por sumergirse de forma absoluta en la psicología de sus personajes. Momoa confesó que, ante una filmografía tan rica y variada, le resulta imposible elegir una sola película, aunque mencionó algunas de las más celebradas, entre ellas Pandillas de Nueva York, Petróleo sangriento, Mi pie izquierdo y El último mohicano.
Momoa calificó al actor británico de “fenómeno de la naturaleza” y “tesoro nacional”, destacando la capacidad única de Day-Lewis para transformar su identidad en cada papel, llevando la interpretación hasta el máximo rigor.
Influencia en la construcción profesional de Momoa
La admiración que Jason Momoa profesa por estos maestros del cine va más allá de una mera declaración; representa una línea de trabajo e inspiración constante que ha marcado el rumbo de su propia carrera.
El actor reconoció que nutrirse del estudio de las técnicas de estos grandes intérpretes resultó clave en el paso de modelo a estrella internacional, permitiéndole abordar sus propios personajes desde una perspectiva más profunda y comprometida.
Según Indie Hoy, este ejercicio de observación y aprendizaje favoreció su consolidación en la industria, convirtiéndolo en una figura que busca proyectar autenticidad y evolución permanente.