A solo cuatro días de haber asumido la presidencia de forma transitoria, José Jerí ha buscado proyectar una imagen de firmeza en materia de seguridad ciudadana. Sus recientes visitas a penales como Castro Castro y Ancón I, acompañado por altos mandos policiales y del INPE, han desatado comparaciones con el estilo del presidente salvadoreño Nayib Bukele, conocido por su política de “mano dura” contra las maras y su puesta en escena en cárceles de máxima seguridad.
Durante el programa Panorama, el politólogo Fernando Tuesta, exjefe de la ONPE, fue consultado sobre estas similitudes. Su análisis fue tajante: “La asociación con Bukele es más que notoria”, señaló. Sin embargo, también advirtió que la estrategia de imagen no puede sostenerse sin acciones de fondo.
Una imagen sin respaldo
Para Tuesta, es evidente que Jerí busca proyectar cercanía con la ciudadanía y aparecer como un presidente activo, pero ese intento de posicionamiento no se construye de la noche a la mañana. “Bukele, cuando iba a las cárceles, ya había vencido a las maras. Y además, fue alcalde, tuvo experiencia previa. Jerí no tiene experiencia en la administración pública, más allá del cargo parlamentario que ostentó”, afirmó.
El analista subrayó que el uso de redes sociales, la transmisión de actividades por TikTok y las fotos “cuidadosamente encuadradas” son parte de una narrativa visual que apunta a reforzar su presencia ante la opinión pública. Pero advirtió que estas acciones deben estar respaldadas por políticas efectivas, sobre todo en un contexto donde la crisis política y la inseguridad demandan soluciones urgentes.
Tuesta enfatizó que construir una figura política no puede reducirse a emular gestos o escenografías. “No nace abruptamente ni por azar llegar a la presidencia. Bukele tuvo un proceso político y electoral que lo respaldó. Jerí llegó en un contexto de vacancia, sin una estructura política sólida ni experiencia ejecutiva”, recalcó.
Operativos sin ministros
El operativo del sábado 11 de octubre en el penal de Ancón I fue el punto de partida de esta estrategia visual. Coordinado con la Policía Nacional y el INPE, incluyó la incautación de celulares, armas y drogas.
La puesta en escena recordó directamente a los actos de Bukele en El Salvador, con el presidente rodeado de autoridades, recorriendo pasillos carcelarios y observando a internos arrodillados. Sin embargo, en ese momento, no contaba con un solo ministro en funciones, lo que debilitaba su capacidad institucional para ejecutar medidas que tengan impacto.
Desde su juramentación, Jerí lleva más de 96 horas sin anunciar la conformación de su gabinete. La falta de un Consejo de Ministros impide que cualquier acto presidencial tenga validez jurídica, según establece la Constitución. Este retraso generó críticas tanto desde el Congreso como desde sectores académicos y políticos.
Este martes 14 de octubre, finalmente, Jerí anunció que en las “próximas horas” tomará juramento al nuevo gabinete, aunque aún no se han oficializado los nombres. “Más tarde, cuando juramente el gabinete, tendremos esa coordinación adicional para aplicar lo que hoy se acuerde”, declaró durante una reunión con alcaldes de Lima Metropolitana.
