Juana Tinelli reapareció públicamente en las redes sociales a solo una semana de haber desatado un escándalo tras denunciar que recibió amenazas y expresar que no compartía muchas de las decisiones que su padre toma desde hace un tiempo.

En medio de la tormenta por la que se mostró visiblemente afectada durante los últimos días, la hija de Marcelo Tinelli quiso llevar calma a sus más de 2.7 millones de seguidores en Instagram, por lo que desde sus stories compartió dos fotografías que la muestran en la intimidad de su hogar.

Con un look descontracturado, jogging rosa pastel, buzo blanco, medias y pantuflas, posó sentada en el suelo con las piernas cruzadas y frente al espejo. Con una leve sonrisa, dejó ver que de a poco se recompone del hecho por la que quedó expuesta y que desató una interna familiar entre las exparejas y madres de los hijos del conductor.

Cabe destacar que tras la denuncia judicial, la joven de 22 años cuenta con botón antipánico y una consigna policial en la puerta de su domicilio como medidas de protección. Según confirmaron fuentes judiciales a LA NACION, la hija de Marcelo Tinelli y Paula Robles acudió a la Justicia después de un episodio ocurrido el miércoles 29 de octubre. En su relato, detalló que recibió una llamada de un hombre que le advirtió que ella y toda su familia debían cuidarse.
Pero, el escándalo se intensificó cuando Juanita decidió romper el silencio con un fuerte descargo en sus redes con el que destapó una interna familiar sin precedentes. “Durante mucho tiempo elegí callar. Callar por miedo, por costumbre, por amor y fidelidad para proteger a quienes más amo. Pero hay momentos en los que el silencio deja de ser refugio y se convierte en una carga que duele más que cualquier palabra”, expresó.

Y continuó: “Hoy hablo desde ese lugar, desde la vulnerabilidad, desde el miedo, pero también desde la necesidad de vivir en paz. Hace poco viví una situación que me llevó a sentir un límite. Fui amenazada, y aunque no quiero detenerme en los detalles, eso fue suficiente para entender que no puedo seguir viviendo con miedo por decisiones que no tomé”.

Además, manifestó: “No comparto ni avalo muchas de las decisiones que mi papá ha tomado en los últimos años. Creo que esas acciones lo han llevado a atravesar momentos difíciles que no me corresponden, pero sí me afectan profundamente. No puedo responsabilizarme por lo que hice, pero sí por lo que siento y por cómo eso me atraviesa, a tal punto de temer por mi vida, por mi libertad”.
Por último, escribió: “Mi papá una vez me dijo que, si algo me da miedo, vaya hacia eso. Que detrás del miedo está la fuerza más grande, el aprendizaje y hasta cierto punto lo que uno realmente es. Y hoy se lo agradezco porque entiendo que tenía razón. Porque detrás de este miedo está mi verdad, mi voz y mi derecho a vivir. Y sí, al tener exposición, te da miedo equivocarte. Pero siento que para crecer y lograr tus objetivos, hay que equivocarse, de esa forma los lográs”.
