LA PLATA.- El gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof, busca tener aprobada hoy la autorización para tomar nueva deuda en sesiones extraordinarias y garantizarse así los fondos para pago de aguinaldos de unos 550.000 empleados públicos.
Hay un principio de acuerdo en el interior del peronismo para sancionar la Ley de Financiamiento, que incluye la creación de un Fondo de Fortalecimiento de Inversión Municipal, condición fijada por los intendentes para dar su consentimiento a los legisladores que les responden en la Legislatura.
No obstante, el acuerdo inicial en la interna de Unión por la Patria alcanzado tras la asunción de las nuevas autoridades de la Cámara de Diputados, es un avance, pero no es suficiente: la ley requiere lograr reunir dos tercios de los votos de los presentes para aprobar La ley de Financiamiento que autoriza a Kicillof a tomar deuda por US$ 3035 millones -gran parte destinada a cancelar amortización de deuda- más otros US$ 650 millones para organismos descentralizados, según precisaron diputados de La Cámpora.
Las persistentes diferencias sobre el Fondo de Fortalecimiento de Inversión Municipal quedaron en el centro de la discusión para la postergación de la Ley de Financiamiento.
El Poder Ejecutivo se comprometió a crear un fondo para los municipios de $352.000 millones y a transferir a los municipios $250.000 millones – en cinco cuotas- de manera independiente al porcentaje de la deuda que finalmente la provincia coloque en el mercado.
“Vamos a acompañar”, dijo ayer Facundo Tignanelli, presidente del bloque de Unión por la Patria tras la renovación de la presidencia para un aliado de Máximo Kirchner, Alejandro Dichiara. “Vamos a buscar todos los consensos posible”, prometió el nuevo presidente.

Este bloque alineado reúne 37 votos, pero está muy lejos de alcanzar para lograr los dos tercios. Son diez los bloques: Kicillof espera contar con el aval de Nuevos Aires, que tiene tres legisladores conducidos por Gustavo Cuerva, y con los votos de Unión y Libertad, conducidos por Martín Rozas, que tiene seis diputados. Hasta allí la suma da 46. La clave está en los dos bloques escindidos de la UCR: están responden a intendentes que necesitan los recursos.
La UCR+ Cambio Federal, que tiene nueve diputados, exige que las cuotas del Fondo de Fortalecimiento de Infraestructura Municipal se paguen en tres cuotas, no en cinco. También puso reparos Somos Buenos Aires, que tiene seis diputados. En caso de alinear a estos bloques, Kicillof pisaría los 60 votos. Y recalca que son dos tercios de los presentes los que requieren para votar. Un piso más cerca que los dos tercios de los 92 escaños que componen el cuerpo.
La Libertad Avanza -que en diputados ratificó la conducción del bloque de Agustín Romo- anunció que no acompaña la votación. Así lo hizo saber Sebastián Pareja, al asistir ayer a la jura de los nuevos diputados. Y exigió que los socios del Pro voten en el mismo sentido. “Si los arrastra, estamos complicados”, se sinceró un armador de Unión por la Patria.
Tampoco votarán los diputados del Frente de Izquierda de los Trabajadores.
Kicillof espera que se vote -y pase al Senado- porque desde la semana que viene el bloque de La Libertad Avanza más los aliados del Pro sumarán 31 diputados. De estos, 20 serán de LLA y 11 del Pro. Un interbloque no conformado, pero que presiona al gobernador a través de Sebastián Pareja: este advirtió que en caso de votar con Kicillof el Pro quedaría eyectado de la alianza de gobierno. Desde la semana que viene Unión por la Patria engrosará su bloque a 39 y será más difícil convencer a los libertarios que no tienen intendentes.

En el Senado, que preside Verónica Magario, el trámite parece más fácil: hoy el bloque de Unión por la Patria tiene 21 escaños que podría sumar a los tres de Unión y Libertad, al legislador de derecha popular y eventualmente a los ocho senadores de las dos vertientes radicales, que necesitan los fondos para que paguen los aguinaldos sus intendentes. Los bloque de Pro y La Libertad Avanza suman 13. Nueve responden al partido que fundó Mauricio Macri y cuatro al de Javier Milei.
La semana que viene tras la jura prevista para el lunes feriado Unión Por la Patria tendrá quorum propio con 24 escaños, pero el bloque de La Libertad Avanza crecerá hasta sumar 16, un número que podría bloquear los dos tercios: aún así, Kicillof podría contar con los 3 senadores escindidos de los libertarios y los 3 radicales.
En caso que hoy se trabe el endeudamiento, el gobernador aún podría esperar una nueva sesión extraordinaria antes del recambio legislativo, el miércoles próximo. Verónica Magario sabe que esta es una posibilidad y adelantó la jura al feriado, de modo que aún pueden sesionar el martes con la antigua composición.
