Erick Moreno Hernández, uno de los delincuentes más buscados del Perú, fue detenido en una vivienda humilde de la localidad de San Roque, en San Lorenzo, Paraguay. Alias ‘El Monstruo’ no opuso resistencia y fue entregado a los altos mandos de la PNP que viajaron para concretar su captura.
El ministro del Interior, Carlos Malaver, destacó el trabajo de inteligencia conjunto entre las policías de Perú, Paraguay, Brasil y Bolivia, que desde hace más de un año seguían de cerca al cabecilla de Los Injertos del Cono Norte.
No obstante, la captura estuvo precedida por cuestionamientos sobre cómo Moreno Hernández lograba evadir constantemente a la justicia. Una de las hipótesis apunta a la complicidad de malos efectivos de la PNP. Según Malaver, el dinero fue la principal herramienta del delincuente para sobornar agentes, falsificar documentos y garantizar su libertad.
“Esta gente necesita de dinero para poder movilizarse y sobre todo para corromper autoridades. Asimismo, hay que tener en cuenta que en muchos casos la porosidad que tienen nuestras fronteras y así como también en algunos casos algunas otras circunstancias de las cuales se ha podido aprovechar, ténganse en consideración. Ha podido falsificar documentos y asimismo, ha cambiado totalmente su aspecto, como usted puede apreciar”, declaró en RPP.
Las investigaciones señalan que la ruta del dinero fue clave para debilitar la red de Moreno Hernández y dificultar su estadía en Paraguay. Hasta el momento, no existe registro oficial de su ingreso a ese país, lo que refuerza la versión de que utilizó identidades falsas.
‘El Monstruo’ habría sido alertado por Policía peruana
Erick Moreno Hernández logró evadir a las autoridades en varias ocasiones antes de su reciente captura en Paraguay. Según testimonios recogidos por el periodista Iván Leguizamón, del Diario ABC de Paraguay, existen indicios de que Moreno Hernández recibió alertas de la Policía Nacional de Perú (PNP), lo que le permitió escapar en diferentes operativos previos a su detención.
Leguizamón indicó que, meses antes de su arresto, Moreno Hernández ya había sido localizado en territorio paraguayo. Durante su estadía en ese país, mantuvo una relación con una ciudadana paraguaya, quien le sirvió de apoyo logístico. “‘El Monstruo’ ya había sido detectado en Paraguay hace varios meses, porque él tenía una pareja paraguaya que incluso ahora se encuentra embarazada y es a la que él le enviaba el dinero de sus crímenes, según había informado la autoridad peruana a la paraguaya”, mencionó el periodista.
Luego de recibir información sobre su paradero, la policía paraguaya desplegó varios operativos, los cuales resultaron infructuosos debido a que Moreno Hernández logró escapar antes de la llegada de los agentes. En el marco de la investigación, dos policías peruanos se desplazaron a Paraguay para tareas de inteligencia, pero la presencia del buscado no resultó sorpresiva para las autoridades locales, que continuaron con el seguimiento.
La captura de Moreno Hernández se concretó gracias a tareas de inteligencia en la frontera entre Paraguay y Brasil. “Es una información de inteligencia trabajada neta y exclusivamente por la Policía Nacional de Paraguay. Es más, la información se consiguió en la zona de la frontera…”, relató Leguizamón.
Se sospecha que Moreno Hernández habría recibido alertas de “malos policías” peruanos cuando las autoridades paraguayas solicitaron datos oficiales a Lima. Ahora se espera su expulsión para que enfrente la justicia en Perú.
