“La justicia cojea, pero llega”, con este famoso refrán que es usado en Colombia en casos donde las decisiones judiciales pueden extenderse por amplios periodos, algunos usuarios en redes sociales celebraron la decisión que dio a conocer la Sala Penal de Tribunal Superior del Distrito Judicial de Cartagena.
Todo debido a que se confirmó en segunda instancia la condena que se le impuso a Libardo José Guerra Alcázar, más conocido como alias Libardito, por haber participado en el crimen de una mujer de 40 años. La determinación se anunció el viernes 25 de abril de 2025, poco más de dos años después del día que se presentó el asesinato.
Los hechos ocurrieron luego de que “Libardito” llegó con su primo conocido con el alias de Chucha hasta la calle principal del barrio Chiquinquirá en Cartagena de Indias (Bolívar). Allí atentaron contra la vida de una persona, pero al final quien murió no fue su objetivo, sino una ciudadana que nada tenía que ver en la cuestión: Yasmina Lambis Pérez.
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Desde el primer día cuando se presentó el ataque a bala, el asesinato de Pérez, generó indignación y rabia entre los habitantes del lugar, donde ella era conocida por la mayoría de los miembros de la comunidad.
“Libardito” y “Chucha” resultaron ser primos: qué dijo la hermana de Yasmina
“Se escucharon los disparos y cuando vimos, Yasmina estaba ensangrentada. La llevamos al Hospital Universitario del Caribe, pero horas después nos dijeron que había muerto”, contó en su momento una de las hermana de la victima al diario El Universal de Cartagena, y que explicó que todo ocurrió mientras almorzaban en familia la tarde del Viernes Santo 7 de abril de 2023.
Mientras adelantaban la reclamación del cuerpo en las instalaciones del Instituto Colombiano de Medicina Legal y Ciencias Forenses de la Ciudad amurallada, la familiar precisó también que “los que llegaron armados y en moto también son del barrio, los conocen como ‘Libardito’ y ‘el Chucha’. Ambos tienen mala reputación en la comunidad”.
“El que disparó fue ‘el Chucha’, pero ‘Libardito’ estaba con él y le decía que disparara. Ellos son primos”, contó la hermana de Yasmina.
Todo lo anterior que comentó la familiar de la víctima parece que era bien sabido por la mayoría de los habitantes del barrio, porque mientras los familiares se llevaron al centro médico a la víctima de las balas, la situación en Chiquinquirá estaba al rojo vivo.
“Libardito” se salvó de ser linchado por el crimen de Yasmina en el barrio Chiquinquirá de Cartagena
En el barrio todo era caos y gritos cargados de improperios, por cuenta de la golpiza y las pedradas que recibió “Libardito”, que vio en los policías a los ángeles de la guarda que le salvaron la vida.
Fue gracias a ellos que logró ser trasladado hasta un centro médico, y allí se le notificó de su detención. La Policía Metropolitana confirmó en ese momento que “Chucha” alcanzó a escapar de la turba enardecida, pero Guerra Alcázar no corrió con la misma suerte, y hasta estuvo a punto de morir.
“Nos dijeron que ahora que se recupere ese pelado (”Libardito») lo pueden dejar libre y nosotros como familia no lo podemos permitir, por eso estamos haciendo las denuncias pertinentes. También esperamos que capturen al que disparó”, añadió en esa primera etapa del caso la hermana de la víctima al mismo diario.
Por tal motivo se logró legalizar la captura de Guerra Alcázar días después de ser dado de alta del centro de salud, donde se recuperó de los golpes y heridas que sufrió producto de los puñetazos, patadas y pedradas que recibió.
La familia de Yasmina estaba viendo a unos jóvenes jugar cuando se escucharon las detonaciones en el barrio Chiquinquirá
El atentado no tenía como objetivo a Yasmina sino a otro hombre que se encontraba en las inmediaciones de su casa.
De acuerdo con el relato de la hermana de la víctima, toda la familia estaba reunida en la terraza observando a unos jóvenes jugar fútbol en la calle, cuando dos individuos se acercaron. Uno de ellos sacó un arma y disparó, desatando el caos. En ese momento, Lambis fue alcanzada por una bala perdida.
“Yasmina comía arroz de frijolito con pescado cuando llegaron dos tipos y uno sacó un arma de fuego y disparó contra otro hombre que estaba cerca de la casa”, explicó la familiar de Yasmina.
Esta versión se soporta en lo que resolvió la Sala Penal de Tribunal Superior del Distrito Judicial de Cartagena en segunda instancia. En el documento oficial se detalló que “un fiscal de la Unidad de Vida de la Seccional Bolívar (Fiscalía) demostró que el hoy sentenciado (”Libardito“) conducía una motocicleta desde la cual el parrillero que viajaba con él, disparó contra una mujer, de 40 años, quien se encontraba en la terraza de su casa”.
La pena con la decisión del alto tribunal pasó a ser de 38 meses y 3 meses de cárcel en primera instancia, a 20 años en la segunda.
Esto se debe al cambio en la tipicidad de los delitos que se imputaron al inicio de apertura del caso. Se pasó de cargos por homicidio agravado y fabricación, tráfico, porte o tenencia de armas de fuego, accesorios, partes o municiones; a homicidio simple.
La investigación del caso seguirá para dar con el autor material del crimen, alias “Chucha”.