Netflix acaba de estrenar Reclutas (Boots), una nueva serie que mezcla drama y comedia para retratar la vida dentro del Cuerpo de Marines de Estados Unidos en los años noventa, en una época en la que ser gay era motivo de expulsión.
La producción de ocho episodios, creada por Andy Parker (Tales of the City), se inspira en las memorias reales del exmarine y guionista Greg Cope White, autor del libro The Pink Marine (2015). En ese texto se narra su paso por el ejército durante la era Reagan y su proceso de aceptación personal.
Un joven gay entre los Marines
A los 18 años, Greg Cope White pesaba 5 kilos menos del mínimo exigido para enlistarse. Tal como relató en sus memorias, su reclutador lo ayudó a “ganar” ese peso de forma insólita: tomó una tubería de plomo, la aplastó con un martillo y la pegó con cinta adhesiva en su entrepierna. Gracias a ese improvisado truco, White logró ser aceptado en los Marines.
White acudió a ese lugar con una idea sumamente ingenua. En el verano de 1979, su mejor amigo Dale lo llamó para decirle que debía cumplir un compromiso con el ejército.
“Me dijo: ‘Voy al campo de entrenamiento de los Marines por el verano’, y todo lo que escuché fue ‘campamento de verano’”, relató el autor. “Pensé: me encantaría un campamento de verano, así que dije: ‘Voy contigo’”.
Pero lo que encontró en la base de Parris Island, Carolina del Sur, distaba mucho de un campamento juvenil. Para variar, White nunca había corrido un kilómetro, ni visto una película de guerra.
“Llegamos en plena noche. Había luces cegadoras, los instructores gritaban, y pensé: esto no es nada como lo imaginé”, recordó.
Durante trece semanas, soportó marchas, pruebas físicas y un ambiente que exigía dureza, silencio y absoluta disciplina castrense.
Pero había otro factor que hacía su experiencia muy distinta a la de la mayoría. “Era consciente de mi sexualidad a muy temprana edad, y también de que la sociedad me decía que no había lugar para mí”, recordó en Time.
A pesar de las dificultades, completó su entrenamiento y fue ascendido por mérito, uno de los pocos de su pelotón. Durante seis años sirvió en secreto, ocultando su orientación sexual en una época en la que revelar que era gay habría significado la expulsión.
“No podía seguir mintiéndoles a estos hombres con los que era tan cercano”, confesó sobre su amistad con sus colegas.
Al dejar el ejército con una baja honorable a los 26 años, White se trasladó primero a Nueva York y luego a Los Ángeles, donde inició una carrera en la televisión. Hoy trabaja como guionista y productor, con créditos en series como Dream On, Life With Louie y la comedia navideña Holiday Rush.
“Irónicamente, los Marines me dieron la confianza para salir del clóset. Puedo entrar a cualquier lugar, amigable o no, y hablar con cualquiera. Eso viene de ellos”.
La conexión con el director
Décadas después, la historia de White historia se convirtió en The Pink Marine, un libro que llamó la atención del guionista y productor Andy Parker, quien también creció como un adolescente gay en un entorno conservador.
“Cuando recibí el libro de Greg, sentí que estaba viendo el camino que no tomé”, explicó Parker a Time. Ese enlace personal fue el punto de partida para transformar el relato en una serie de ficción.
Parker decidió no hacer una adaptación literal. “No iba a contar la historia de su vida; necesitaba la libertad para crear un nuevo personaje que emprendiera su propio viaje”, dijo.
Así nació Cameron Cope, interpretado por Miles Heizer, un joven recluta que ingresa a los Marines con su mejor amigo, Ray McAffey (Liam Oh), buscando un sentido de pertenencia.
El creador cambió además la época: la serie se ambienta en 1990, tres años antes de la política de “Don’t Ask, Don’t Tell”, que permitía a los miembros del ejército servir solo si ocultaban su identidad.
“El cambio temporal permitía explorar un momento de transición: el límite entre la represión y la posibilidad de cambio”, explicó Parker.
El propio Greg Cope White coincidió en la libertad creativa del showrunner que “amplió la historia para explorar todo el pelotón”.
“Muchos personajes del libro, algunos nuevos. Cameron y Ray están basados en mí y en Dale, pero también los llevamos a lugares donde yo nunca estuve”, dijo el marine retirado.
Una mirada diferente al mundo militar
Reclutas propone una perspectiva distinta del entorno castrense, uno donde la camaradería puede coexistir con la dureza de la disciplina.
Parker y la showrunner Jennifer Cecil contaron con el apoyo de veteranos militares que supervisaron los protocolos y entrenaron al elenco antes del rodaje en Luisiana.
El reparto incluye también a Vera Farmiga como la madre de Cameron y a Max Parker y Ana Ayora en papeles secundarios. La serie fue uno de los últimos proyectos producidos por Norman Lear, fallecido en 2023, lo que la convierte en un homenaje adicional a su legado televisivo.