Beau es una cordera que a pocos días de nacer su mamá lo abandonó. No quiso hacerse cargo de ella y la apartó del resto del grupo. Algo que llamó la atención de Olivia Jane, una granjera estadounidense que de inmediato intentó proteger al animal, sin esperar que su perro Max la adoptaría como a un cachorro.
Las redes sociales están repletas de historias de animales que conmueven a sus usuarios por la crudeza de los relatos. Pese a que en muchas situaciones parece ficción, en ciertos casos no lo es, como la experiencia de la que Jane fue testigo al ver el profundo amor que su mascota le entregó a la cordera.
No es común que una madre decida abandonar a sus crías, pero en la naturaleza este hecho suele darse esporádicamente y es en parte debido a diversos factores o motivos que la gestante decide sobre el recién nacido.
“Cuando Beau nació, me di cuenta enseguida de que la mamá no estaba interesada. Solo intenté ser muy paciente con ellas, pero me di cuenta de que iba a tener que apartarla”, dijo Olivia Jane en un video testimonial que compartió con el medio especializado en animales, The Dodo.
De inmediato notó que Max “no iba a arruinar” ni “poner en peligro” a la cordera y es por ello que la llevó a su casa -a metros de la granja-, y su mascota la adoptó como “a su propio bebé”. “Fue un alivio enorme para mí”, sostuvo la campesina.
Sobre su vínculo fraternal, contó: “Los dejo salir del pastizal y recorrer toda la propiedad. Son muy, muy similares”. Al mismo tiempo, en el video puede verse la buena relación entre los dos, donde el perro lame, acompaña y guía a Beau por todos los rincones. Incluso permanece atento a cualquier señal de peligro.
Uno de los momentos más difíciles para la cordera fue cuando tuvo que volver con el resto de las ovejas. Ya había forjado un lazo muy estable con Max y con todos los individuos de la casa, pero su destino era otro. “Estaba mentalmente preparada para que se desconectara de mi perro. Pero cada día que estamos afuera, Beau corre directamente hacia él. Es muy claro que tienen una conexión. A pesar de todo, ellos se ven todos los días”.
En su cuenta de Instagram, Jane comparte seguido una cronología de cómo es su día a día en el campo. Entre animales de granja y contacto con la naturaleza, también tiene a dos de sus protagonistas principales, Max y Beau. Ahora, la oveja es más grande, está cubierta de lana, pero todavía no perdió esa curiosidad y ganas de jugar con quien considera como su padre.
“Hermosos”; “Ojalá la gente pudiera ser más como estos animales”; “Tan maravillosos”; “Encantador, puro amor”; “Qué linda historia, me hace sentir bien” y “Los perros nunca dejan de sorprenderme”, fueron algunos de los mensajes que los seguidores de Jane plasmaron en la sección de comentarios del video viral.
De esta manera, lejos de lo que puede pensarse o imaginarse, el vínculo entre dos especies distintas puede suceder. Max y Beau son la prueba perfecta de que el amor y la amistad, sin importar la procedencia, es mucho más fuerte.