Cada vez surgen más trucos caseros que prometen facilitar las tareas del hogar y ofrecer soluciones naturales y económicas. En esta oportunidad, dos ingredientes muy comunes en la cocina —el laurel y el bicarbonato de sodio— se convierten en protagonistas de un curioso método que muchas personas están poniendo en práctica. Aunque ambos suelen utilizarse para cocinar o limpiar, su combinación puede tener usos sorprendentes que van mucho más allá de lo que la mayoría imagina.
Esta combinación resulta ideal para mantener la casa limpia, libre de malos olores y con una fragancia fresca y natural que puede permanecer durante varios días. Además, se trata de una alternativa sencilla y ecológica frente a los productos químicos tradicionales, ya que ambos ingredientes son fáciles de conseguir, económicos y naturales.
Para qué sirve la mezcla de laurel y bicarbonato
El laurel y el bicarbonato de sodio forman una dupla que sorprende por la cantidad de usos prácticos que tiene dentro del hogar. Más allá de su presencia habitual en la cocina, esta combinación se destaca por sus propiedades limpiadoras y aromáticas. Mientras el bicarbonato actúa como un potente aliado para eliminar la suciedad y neutralizar los olores, las hojas de laurel aportan un toque fresco y natural, además de tener efectos antibacterianos y antifúngicos que ayudan a mantener los espacios más higiénicos.
A continuación, las mejores opciones para usar la mezcla:
- Eliminar malos olores: colocá hojas de laurel trituradas y bicarbonato en recipientes abiertos dentro de la heladera, la alacena o el tacho de basura. Absorben los olores y dejan un aroma fresco.
- Limpiar superficies: usá la mezcla como polvo limpiador en mesadas, piletas o azulejos. Es ideal para quitar manchas difíciles y restos de grasa.
- Mantener cajones y armarios frescos: un pequeño saquito de tela con la mezcla dentro de los cajones evita que la ropa tome olor y, según se cree, también ayuda a alejar insectos.
- Aromatizar ambientes: quemá unas hojas de laurel sobre bicarbonato en un recipiente resistente al calor, o colocá la mezcla cerca de radiadores y estufas para perfumar naturalmente los ambientes.
Cómo preparar la mezcla de laurel y bicarbonato
Paso a paso:
- Secá bien entre cinco y seis hojas de laurel para evitar que se forme moho.
- Triturá las hojas hasta que queden en polvo o en pedacitos chicos.
- En un bowl, mezclá el laurel triturado con dos cucharaditas bicarbonato.
- Guardá la mezcla en un frasco con tapa para que se mantenga seca y lista para usar.
Las mejores opciones para usar la mezcla en casa
- Desodorizante: poné una cucharada de la mezcla en un saquito de tela y colocalo en la heladera, la alacena o el tacho de basura. Cambialo cada dos o tres semanas.
- Limpiador de superficies: espolvoreá la mezcla sobre la mesada, la pileta o los azulejos. Frotá con un paño húmedo y enjuagá con agua limpia.
- Aromatizador de ambientes: dejá la mezcla en un recipiente abierto en habitaciones, baños o armarios. Renovala para que el aroma siga siendo intenso.
Además, la hoja de laurel se asocia con varios beneficios para la salud, ya que ayuda a reducir gases, cólicos y acidez, lo que favorece una digestión más liviana gracias a sus aceites esenciales como el eugenol. También contiene compuestos como flavonoides y taninos que combaten la inflamación y el estrés oxidativo, fortaleciendo el sistema inmunológico. Al usarse en infusiones o vapores, puede aliviar la congestión nasal y los síntomas del resfrío.