La Policía Metropolitana de Londres ha iniciado una campaña urgente instando a posibles víctimas a presentarse, después de que la justicia dictó una dura condena contra Jonathan Carl por delitos de violación y por la transmisión imprudente de una enfermedad de transmisión sexual. El caso, calificado por las autoridades como uno de los mayores de su tipo en la ciudad, ha puesto bajo intensa atención la importancia de la detección, el rastreo de víctimas y la prevención de nuevas agresiones.
Carl, de 42 años y residente de Hornchurch, recibió una pena de 17 años de prisión por violación, junto con una orden de prevención de daño sexual por 15 años. La sentencia fue dictada el pasado 29 de agosto en el Tribunal de la Corona de Snaresbrook. Según lo publicado por la Metropolitan Police Newsroom, Carl fue encontrado culpable por un delito de violación y se declaró culpable de causar lesiones graves relacionadas con la transmisión de una enfermedad de transmisión sexual.
El caso salió a la luz en enero de 2024, gracias a la denuncia de dos hombres que se encontraron y compartieron experiencias similares. Su testimonio permitió a las autoridades identificar un patrón de abuso.
Carl fue arrestado en su domicilio y la investigación digital reveló que había contactado y mantenido relaciones sexuales con hasta 400 hombres, entre 2019 y 2023, a través de aplicaciones como Grindr y SCRUFF. La policía logró identificar a 82 hombres, algunos diagnosticados con VIH, pero advierte que 318 personas aún podrían desconocer su exposición.
La inspectora jefe Sarah Bishop, a cargo de la investigación, manifestó profunda preocupación por el bienestar de quienes todavía no han sido localizados. “Nuestra investigación puso en evidencia la gravedad de los delitos de Carl y permitió llevarlo ante la justicia. Pero seguimos muy preocupados por quienes aún no han sido identificados. Creemos que hasta 318 hombres podrían ser víctimas y necesitan presentarse para recibir ayuda”, declaró Bishop, según consignó la Metropolitan Police Newsroom.
Víctimas, secuelas y el llamado a buscar ayuda
El perfil “depredador” de Carl se hizo evidente a partir del análisis de mensajes y el intercambio de información digital. Según la policía, Carl tomó la decisión consciente de no tratar su condición y mintió sobre su estado seropositivo, actuando con plena conciencia del riesgo.
El impacto sobre las víctimas fue devastador. “Me sentí impotente y menos que un ser humano. Mi mayor motivación fue evitar que esto le sucediera a alguien más”, declaró uno de los afectados, según reseña Sky News.
Dado el alcance del caso, el llamado es claro: cualquier persona que haya tenido contacto con Carl debe acudir a los servicios policiales y médicos para acceder a pruebas confidenciales, asesoramiento y apoyo.
El foco de las autoridades está puesto en identificar a todas las víctimas, ofrecer atención inmediata y reconstruir la confianza pública frente a la magnitud del caso. LaPolicía Metropolitana de Londres ha establecido un sistema específico de contacto para quienes crean haber sido afectados. Los posibles afectados pueden comunicarse con los detectives en el número 0207175273, escribir al correo [email protected] o usar el sistema de denuncia online, indicando el número de referencia CAD2972/19Sept25.