Luego que el presidente Donald Trump firmó una nueva orden ejecutiva para ayudar a las armadoras automotrices de sus país a enfrentar las medidas arancelarias a las importaciones de piezas de automóviles, México consideró que seguirá teniendo ventaja frente a otros países debido a que no pagará tarifas debido al T-MEC.
La Secretaría de Economía, a cargo de Marcelo Ebrard, apuntó que nuestro país mantiene un trato preferencial, gracias al tratado de libre comercio, en la exportación de motores, arneses, suspensiones y otros componentes que las automotrices llevan a sus plantas dentro de Estados Unidos.
“El conjunto de medidas anunciadas otorga a México mejores condiciones de exportación que las que prevalecerán para otros países competidores”, señaló la Secretaría de Economía.
El gobierno mexicano reconoció que la política proteccionista de EEUU no es la ideal, sin embargo, México todavía mantiene su ventaja relativa frente a otras naciones que exportan componentes hacia ese país.
Además, la industria automotriz mexicana se verá beneficiada de las medidas del presidente Trump para que las tarifas arancelarias no se acumulen con las del acero y aluminio.
“Todo el contenido T-MEC de los vehículos ligeros ensamblados en los Estados Unidos tendrá un arancel cero”, resaltó la dependencia, la cual agregó que otros países sí pagarán, manteniendo así la competitividad de la industria mexicana.
EEUU alcanza acuerdo con armadoras automotrices
La Casa Blanca anunció este martes un acuerdo con los fabricantes de automóviles en Estados Unidos que busca mitigar el impacto de los aranceles impuestos por la Administración del presidente Donald Trump sobre las importaciones de vehículos.
Aunque se mantendrán los gravámenes actuales del 25% sobre los automóviles importados, las nuevas medidas evitarán que otros aranceles, como los del 25% sobre el acero y el aluminio, se sumen a los ya existentes, lo que podría haber agravado la situación para la industria automotriz.
El secretario de Comercio de Estados Unidos, Howard Lutnick, calificó el acuerdo como un logro significativo para la política comercial de Trump.
Lutnick afirmó que el pacto recompensa a las empresas que fabrican en el país y, al mismo tiempo, facilita el camino para los fabricantes que han mostrado su compromiso de invertir en Estados Unidos y expandir su producción nacional. Sin embargo, no ofreció detalles sobre las condiciones específicas del acuerdo.
El lunes, el Wall Street Journal informó que Trump planeaba anunciar una nueva estructura de aranceles para los automóviles importados.
Esta medida evitaría un aumento adicional en los gravámenes del 25 % que han estado en vigor desde abril, lo que podría aliviar la presión sobre las compañías automotrices.
Estas empresas ya enfrentan dificultades debido a los aranceles del 25 % sobre el acero y el aluminio, materiales esenciales para la fabricación de vehículos.