BRUSELAS.- La Unión Europea (UE) suspendió este jueves por un período de 90 días su primera tanda de represalias por los aranceles que Estados Unidos ya impone al acero y al aluminio europeo para “dar una oportunidad a la negociación” con Washington. La decisión llega después de que el presidente Donald Trump anunciara el miércoles una tregua parcial por el mismo lapso de las cargas de 20% a las importaciones del bloque.
“Tomamos nota del anuncio del presidente Trump. Queremos dar una oportunidad a las negociaciones”, dijo la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, en un breve comunicado difundido en redes sociales.
Sin embargo, también advirtió: “Si las negociaciones no son satisfactorias, entrarán en vigor nuestras contramedidas. Todas las opciones siguen sobre la mesa”.
We took note of the announcement by President Trump.
We want to give negotiations a chance.
While finalising the adoption of the EU countermeasures that saw strong support from our Member States, we will put them on hold for 90 days.
If negotiations are not satisfactory, our…
— Ursula von der Leyen (@vonderleyen) April 10, 2025
Bruselas, que tiene la competencia exclusiva de la política comercial de la UE, recibió el miércoles luz verde de los 27 países del bloque para imponer a partir del próximo martes aranceles de 25% a un volumen de compras de Estados Unidos por un valor de casi 21.000 millones de euros, mediante un plan arancelario con recargos que se aplicarían en tres fases: abril, mayo y diciembre.
El anuncio de Von der Leyen frena esta medida pero no paraliza el trabajo de preparación de la respuesta a los aranceles trumpistas, ahora en suspenso, ni los que pesan sobre los automóviles y sus componentes, aún en vigor.
Al inicio de la jornada, la titular de la Comisión Europea celebró la decisión de Trump sobre una “pausa” en la aplicación de los aranceles, y consideró el gesto como un “paso importante para estabilizar la economía mundial”.
Por su parte, el portavoz comunitario de Comercio, Olof Gill, explicó en una rueda de prensa que esto dará también “espacio” a los servicios comunitarios para “analizar” y calibrar la nueva situación en consultas con los Estados miembro y con la industria.
En lo que va de administración republicana, la UE se vio golpeada por tres rondas de aranceles estadounidenses y ahora busca un difícil equilibrio entre ir por una contrapartirda finamente calibrada y el impulso a negociaciones que permitan romper la escalada de tensiones.
En marzo, Trump anunció tasas de 25% a las importaciones de acero y aluminio, y luego anunció otro 25% a todos los autos de fabricación extranjera, medidas que entraron en vigor la semana pasada. El tercer y último paso fue el anuncio de aranceles de 20% sobre los bienes de la UE entre una serie completa de otros gravámenes, que comenzaron el miércoles.
En tanto, el jueves Trump dijo que pausaría su medida después de reconocer a los más de 75 países afectados que, según él, iniciaron negociaciones sobre comercio y no tomaron represalias contra sus últimos aumentos en los aranceles. Los países sujetos a la pausa ahora tendrán un gravamen de 10%, que era el básico.
No obstante, esta decisión de Trump no parece afectar a los aranceles recientemente impuestos a los automóviles, el acero y el aluminio de la UE, que ya están en vigor.
En tanto, China no solamente no quedó incluida en la marcha atrás, sino que el presidente estadounidense aumentó aún más la tasa impositiva sobre las importaciones de ese país, al 125%.
Agencias DPA, AP y AFP