Las discusiones son parte natural de cualquier relación. Sin embargo, la manera en que una pareja atraviesa esos desacuerdos puede determinar la salud del vínculo. Mark Travers, un profesional de la salud mental especializado en vínculos afectivos y graduado de la Universidad de Colorado, reveló que una de las señales más claras de desgaste emocional en una relación aparece cuando, ante un conflicto, no se perciben como un equipo.
El conflicto no es el problema, la forma de enfrentarlo, sí
Travers detalló en un artículo para CNBC que mientras muchas personas conocen teóricamente los elementos fundamentales de una relación saludable, como la comunicación efectiva, la transparencia total y el compromiso mutuo, la mayoría desconoce cómo estos componentes se materializan en situaciones cotidianas.
Esta desconexión entre el conocimiento teórico y la aplicación práctica genera que numerosas parejas se encuentren en circunstancias de deterioro relacional sin percatarse de ello. “Pueden encontrarse en una situación desesperada. Peor aún, no lo reconocen debido a hábitos poco saludables”, aseguró. “Cuando uno se encuentra atrapado en la familiaridad y la rutina, es difícil detenerse y evaluar sus sentimientos”, agregó.
Según el especialista, este fenómeno se agrava debido a patrones conductuales contraproducentes que incluyen la desensibilización emocional, la represión de sentimientos y la normalización de dinámicas disfuncionales. “Como psicólogo especializado en parejas, suelo recomendarles una breve encuesta. Si responden “no” a todas las preguntas, es posible que no sean felices en su relación, pero no se den cuenta“, compartió.
Las cuatro preguntas a las que las parejas que están mal en sus relaciones responden “no”
El psicólogo compartió una encuesta con las señales clave para que cualquier pareja en una relación sentimental puedan saber si se encuentran en hábitos pocos saludables.
- Primera señal: ¿te sientes como si estuvieras en el mismo equipo durante el conflicto?
El primer indicador que propone el especialista se relaciona con la perspectiva que los miembros de la pareja adoptan durante los desacuerdos. La pregunta clave es determinar si ambos individuos se perciben como aliados mientras enfrentan un problema común o como adversarios en una batalla personal.
Travers enfatiza que la metodología del conflicto supera en importancia a las causas que lo originan. Cuando los participantes experimentan consistentemente una sensación de enfrentamiento directo entre ellos, en lugar de unirse para abordar la situación problemática, emerge una dinámica destructiva que requiere análisis profundo.
“Si tu respuesta a esta pregunta es “no”, pregúntate: “¿Por qué estamos luchando?” Si la respuesta no es la relación en sí, siéntense juntos para discutir y restablecer lo que realmente significa ser un equipo”, recomendó.
Estudios realizados por la Asociación Internacional para la Investigación de Relaciones demuestran que cuando ambos miembros mantienen la convicción de que un conflicto particular puede resolverse, aumenta significativamente la probabilidad de encontrar soluciones efectivas. Sin embargo, la actitud optimista por sí sola resulta insuficiente sin una estrategia compartida y claramente definida.
La ausencia de este enfoque colaborativo transforma las discusiones en confrontaciones emocionales que, con el transcurso del tiempo, generan distanciamiento progresivo y acumulación de resentimientos. El contraste mental, técnica que involucra visualizar el futuro deseado junto con la identificación de obstáculos internos, ha demostrado efectividad en la resolución de conflictos solucionables, particularmente en relaciones que mantienen niveles satisfactorios de funcionamiento general, según el estudio.
- Segunda señal: ¿puedes ser tu yo más auténtico cuando estás con tu pareja?
“Las relaciones más sanas te dan espacio para respirar, para reír a carcajadas, llorar a mares, armar un lío y ser raro”, asegura Travers. La capacidad de manifestar la personalidad genuina en presencia de la pareja constituye otro elemento diagnóstico fundamental.
El psicólogo describe las relaciones saludables como espacios que proporcionan libertad emocional para experimentar y expresar la gama completa de emociones humanas, lo que incluye comportamientos espontáneos y características individuales únicas. “Si tienes que recordarte constantemente que debes reprimir partes de tu personalidad, poco a poco comenzarás a perder partes invaluables de tu identidad”, aseguró.
Las investigaciones citadas por Travers indican que individuos que experimentan seguridad al expresarse de manera auténtica y natural tienden a desarrollar comportamientos relacionales más constructivos.
La autenticidad disposicional, definida como el funcionamiento libre del núcleo genuino de una persona en sus actividades diarias, comprende cuatro componentes interconectados:
- La conciencia de los propios rasgos y valores
- El procesamiento objetivo de las experiencias personales
- El comportamiento coherente con los valores internos
- La orientación hacia la apertura en las relaciones íntimas
El especialista asegura que si la respuesta a la pregunta “¿puedes ser tu yo más auténtico cuando estás con tu pareja?” es un “no”, esa persona necesita detenerse y reflexionar. “Mereces estar con alguien que no se inmute al encontrarte con tu yo más auténtico y honesto. Las buenas parejas lo ven como un privilegio especial. No debería sentirse como algo que deba tolerarse”, agregó.
- Tercera señal: ¿sienten genuina curiosidad por tu mundo interior?
La curiosidad interpersonal representa un componente esencial para mantener la conexión emocional a lo largo del tiempo. Durante las etapas iniciales del cortejo, este interés surge naturalmente, lo que impulsa a los individuos a conocer profundamente los pensamientos, perspectivas y motivaciones de su pareja. No obstante, esta curiosidad tiende a disminuir con el establecimiento de la rutina.
Estudios especializados definen la curiosidad interpersonal como el deseo de obtener información sobre otras personas, constituyendo un elemento fundamental para la conexión humana, el sentido de pertenencia y el bienestar general. Esta puede manifestarse como una característica estable de la personalidad o como un estado temporal influenciado por circunstancias específicas.
Además, según el estudio de Fronteras en Psicología, este estado fomenta interacciones de calidad, conversaciones significativas y conexiones auténticas, lo que resulta en el desarrollo de cercanía, confianza y camaradería. También, contribuye a la desescalada de conflictos y se correlaciona positivamente con la empatía, la inteligencia emocional y la autocompasión.
Las personas que mantienen altos niveles de curiosidad interpersonal demuestran mayor precisión en la percepción de otros y desarrollan habilidades superiores para detectar y utilizar señales sociales en la identificación de características de personalidad. Esta capacidad también les proporciona mayor resistencia al rechazo social y facilita la generación de intimidad y satisfacción mutua en las interacciones.
“Un “no” a esta pregunta podría indicar que su relación funciona de forma automática”, aseguró Travers. “Una pareja que realmente se interesa por ti seguirá preguntando, escuchando y aprendiendo sobre ti”, agregó.
- Cuarta señal: ¿Se hacen responsables cuando cometen errores?
El manejo de los errores y la disposición para asumir responsabilidades constituye el cuarto indicador crucial para evaluar la salud relacional. Travers sostiene que la importancia de los errores radica menos en su ocurrencia y más en la forma en que se gestionan posteriormente.
“¿Tu pareja reconoce sus errores e intenta enmendarlos? ¿O evade la responsabilidad, se pone a la defensiva y te culpa a ti?”, cuestiona el especialista.
La diferencia fundamental se establece entre parejas cuyos miembros reconocen sus faltas e intentan repararlas versus aquellos que evaden la responsabilidad, adoptan actitudes defensivas y transfieren la culpa al otro. Las investigaciones sobre resolución de conflictos demuestran que gestos aparentemente menores, como el reconocimiento de errores, las disculpas sinceras o el uso apropiado del humor, pueden prevenir la escalada destructiva de las discusiones.
La ausencia de responsabilidad personal genera, con el transcurso del tiempo, cuestionamientos sobre la confiabilidad mutua y la viabilidad de la relación. Los estudios observacionales han identificado que las reparaciones más efectivas ocurren durante los primeros momentos del conflicto al funcionar como medidas preventivas.
Estas reparaciones tempranas se enfocan principalmente en abordar el clima emocional de la interacción con el objetivo de establecer conexión afectiva, por lo que supera en efectividad a los enfoques que priorizan la resolución cognitiva, la lógica o la racionalidad. “La honestidad, la humildad y un deseo genuino de mejorar deberían ser una norma bilateral en una relación”, asegura Travers.
Implicaciones prácticas para las relaciones
La metodología propuesta por Mark Travers ofrece una herramienta de autoevaluación que permite a las parejas identificar áreas problemáticas antes de que se conviertan en crisis irreversibles. La aplicación de estas cuatro preguntas puede revelar patrones disfuncionales que operan de manera subconsciente en la dinámica de una relación.
Las investigaciones mencionadas por el psicólogo sugieren que la calidad de la amistad entre los miembros de la pareja constituye la base fundamental para la aceptación mutua de intentos de reparación y la construcción de vínculos duraderos.