Después de cursar durante dos años el Bachillerato Internacional en el United World College, la princesa Ariane de Países Bajos (18) y la infanta Sofía de España (18) recibieron sus diplomas con el apoyo incondicional de sus padres. Mientras que la hija menor de los reyes Guillermo y Máxima participó de la ceremonia de fin de curso celebrada en la sede italiana de la institución en Duino, la heredera de Felipe VI y Letizia lo hizo en Gales, Reino Unido.
Esta es la primera vez que la menor de la familia real neerlandesa vivió fuera de su casa, lejos del Palacio Huis ten Bosch. Con más independencia y nuevos horarios de agenda, Ariane aprovechó sus días en el extranjero para seguir con los partidos de hockey y de tenis y desarrollar su costado más artístico –sabe tocar la guitarra, cantar y bailar– en la academia de música de la prestigiosa escuela.
Sofía, por su parte, tiene una vocación más marcada hacia las carreras afines a las ciencias, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas. Si bien se dice que también le gusta Relaciones Internacionales, lo cierto es que la Casa Real española aún no confirmó oficialmente cuál será el camino que planea tomar. Los rumores indican además que la infanta estaría considerando asistir a una universidad en los Estados Unidos, como la de Washington. El destino de las jóvenes royals se develará en las próximas semanas, cuando cada Casa Real dé a conocer los futuros pasos de Ariane y Sofía.