La nueva película “Una batalla tras otra” de Paul Thomas Anderson, reúne a Leonardo DiCaprio y Chase Infiniti en una historia que explora los lazos familiares, los conflictos generacionales y la búsqueda de identidad en un mundo marcado por la tecnología y la memoria revolucionaria.
En una entrevista exclusiva para Esquire, ambos intérpretes compartieron sus impresiones sobre la compleja relación entre sus personajes, la experiencia de trabajar bajo la dirección de Anderson y la dinámica que se generó en el set junto a un elenco de figuras destacadas como Benicio del Toro.
En el centro de la trama se encuentra la relación entre un exrevolucionario, interpretado por DiCaprio, y su hija adolescente Willa, a cargo de Infiniti. La ausencia de la madre, Perfidia, una figura revolucionaria cuya sombra se extiende sobre la vida de ambos, marca el punto de partida de una serie de batallas emocionales y existenciales.
DiCaprio describió este proceso como “una batalla tras otra”, en la que padre e hija intentan reconstruir su vínculo tras la partida de Perfidia. Situación que impulsa el nombre del film. Mientras que Infiniti subrayó que, más allá del reencuentro con su padre, el mayor desafío de Willa es “encontrar su propio camino en el mundo”.
La tensión entre ambos se acentúa por la brecha generacional, especialmente en torno al uso del teléfono móvil, un elemento que, según la actriz, resultó “muy divertido de explorar, sobre todo al principio”, y que el director Anderson convirtió en un eje dramático que añade tensión y realismo a la historia.
Proceso de selección de elenco y química entre actores
El proceso de selección del elenco fue exhaustivo y prolongado. El reconocido intérprete reveló que la búsqueda de la actriz ideal para Willa requirió numerosas reuniones, pruebas de química y hasta sesiones de karate, aunque desde el principio Infiniti fue la favorita del equipo. Sobre esto afirmó: “Buscábamos a la Willa perfecta y Chase fue nuestra primera opción”.
La conexión entre ambos intérpretes se forjó incluso antes del rodaje, cuando coincidieron de manera fortuita en Eureka, la localidad donde se preparaban para filmar. “Tuvimos un almuerzo espontáneo y una salida por helado”, relató DiCaprio, destacando que la autenticidad de su relación fuera de cámara resultó fundamental para dotar de credibilidad a la dinámica padre-hija en la pantalla.
Colaboración con Paul Thomas Anderson y su estilo de dirección
La colaboración con Paul Thomas Anderson fue otro de los aspectos que ambos actores valoraron especialmente. DiCaprio, admirador declarado del cineasta desde hace más de dos décadas, destacó su capacidad para crear mundos originales y sumergir a los actores en ellos. “Es uno de esos directores singulares y asombrosos de nuestro tiempo”, expresó el actor a Esquire.
Lo que más sorprendió a DiCaprio fue la flexibilidad de Anderson como guionista y director, ya que, a diferencia de otros creadores, no se aferra rígidamente a su propio texto y está abierto a las sugerencias del elenco.
Por su parte, Infiniti coincidió en resaltar la confianza que el director deposita en sus actores y mencionó: “Ver a Paul confiar en todos nosotros en el set y darme la oportunidad de comunicar cómo veía a Willa fue realmente especial”. Para ambos, este ambiente de colaboración y apertura resultó clave para el desarrollo de sus personajes y la construcción de la historia.
Personajes secundarios y aportes al filme
El reparto de la película se completa con figuras como Benicio del Toro, quien interpreta a Sensei Carlos, el maestro de artes marciales de Willa. DiCaprio describió a este personaje como “fantástico” y señaló que, al igual que su propio rol, Sensei Carlos tiene un pasado revolucionario.
La alianza entre ambos surge ante la amenaza de fuerzas militares que buscan capturar a Willa, y Sensei Carlos se convierte en el único aliado confiable del protagonista. A propósito de esto, DiCaprio comentó: “Él mantiene la calma durante toda la película, es como las olas del océano”.
Por otro lado, la coprotagonista recordó que las escenas entre ambos actores son, en su opinión, uno de los puntos más altos del filme. El elenco también incluye a Sean, cuya presencia en el set impresionó a Infiniti, quien confesó haberse sentido intimidada al conocerlo, aunque luego descubrió su faceta más amable fuera de cámara.
Anécdotas del rodaje y escenas memorables
Las anécdotas del rodaje reflejan el ambiente de experimentación y camaradería que se vivió en el set. DiCaprio e Infiniti recordaron con humor las múltiples versiones de una escena clave entre padre e hija, en la que el personaje de DiCaprio alterna entre buscar café, mostrarse ebrio y depender de su hija como si fuera una madre para él. “Realmente trabajamos mucho esa escena”, señaló el intérprete.
Chase Infiniti, destacó una escena compartida con Sean como una de las más divertidas, debido a la variedad de desenlaces que se exploraron durante la filmación. Ambos coincidieron en que la construcción de la química entre los personajes fue un proceso orgánico, alimentado por la improvisación y la confianza mutua.
A lo largo de la entrevista para Esquire, Leonardo DiCaprio e Chase Infiniti dejaron entrever que la historia está marcada por la persistencia y la capacidad de los personajes para sobreponerse a los obstáculos.