Pese a que la primavera parecía haberse instalado definitivamente, el ingreso de un frente frío modificará las condiciones meteorológicas durante los próximos días, al menos en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA). Tras las tormentas previstas a partir de la noche de este jueves y que se extenderán hasta el sábado en la Ciudad y el conurbano, la temperatura descenderá de manera abrupta, con mínimas casi invernales.
Tal como indicó el parte del Servicio Meteorológico Nacional (SMN), este jueves la máxima alcanzará el pico máximo en muchos meses, de aproximadamente 30 grados. Sin embargo, la alerta amarilla por tormentas que rige sobre el AMBA -que se intensificará hacia la noche- provocará un cambio drástico en las condiciones. El viernes continuará con lluvias débiles, aunque persistentes.
En el contexto de una jornada calurosa y húmeda como la de este jueves, el organismo recomienda:
- Tomar mucha agua durante todo el día.
- Consumir alimentos frescos como frutas y verduras.
- Usar ropa suelta, de materiales livianos y colores claros.
- Protegerse del sol.
- Prestar atención a lactantes, niños y personas mayores.
De esta forma, se espera otro fin de semana de inestabilidad por lo menos hasta el sábado. Ese día se estima una jornada con cielo parcialmente nublado y viento frío; a partir de la tarde mostrará el retiro de la nubosidad, con una máxima de 20ºC.
Frente a los avisos por tormentas, el SMN aconseja no sacar la basura ni dejar objetos que obstruyan el drenaje del agua; evitar actividades al aire libre; no refugiarse bajo árboles ni postes eléctricos; mantenerse alejado de playas, ríos o piletas; permanecer en lugares cerrados y lejos de artefactos eléctricos; evitar circular por calles anegadas y comunicarse con los servicios de emergencia ante cualquier eventualidad.
El domingo sería el primer día sin lluvias, con aire frío y cielo parcialmente nublado. No obstante, marcará el inicio de una semana mucho más fresca, con mínimas de 9°C y máximas que apenas rondarán los 15°C.
El cambio abrupto en la temperatura
Esta amplitud térmica es poco común para la época y, según los especialistas, se produce por el ingreso de un frente frío proveniente del sur del territorio nacional. “Las temperaturas que se esperan no se consideran normales, aunque tampoco son extremas”, explicó al respecto a LA NACION Cindy Fernández, comunicadora meteorológica del SMN.
“En la primavera es normal tener contrastes bien marcados de temperatura ya que estamos en una transición de invierno a verano”, añadió, mientras que detalló que esta época es la que también produce las alteraciones en cuanto a lluvias e inestabilidad. Esto afectará tanto al AMBA como a las provincias de Chaco, Entre Ríos, Formosa, La Pampa, Mendoza, Río Negro y San Luis, en donde rige una alerta amarilla por tormentas; y al sur de Córdoba, Santa Fe y parte de la provincia de Buenos Aires, en donde asciende al nivel naranja.
En estas zonas se prevén lluvias y tormentas de variada intensidad, acompañadas por abundante caída de agua en cortos períodos, actividad eléctrica frecuente, granizo y ráfagas intensas que podrían alcanzar los 100 kilómetros por hora. Además, se esperan valores de precipitación acumulada de entre 70 y 100 milímetros, que pueden ser superados puntualmente.