El 28 de mayo de 2025, autoridades federales mexicanas lograron la captura de Juan Pablo Bastidas Erenas, alias “El Payo”, presunto miembro del Cartel de los Beltrán Leyva. El operativo tuvo lugar en la colonia Jardines del Bosque de Los Mochis, Sinaloa, donde se ocultaba tras ser identificado por organismos de inteligencia.
Quién es “El Payo”, el operador de fentanilo buscado por Estados Unidos
Juan Pablo Bastidas Erenas, nacido el 11 de marzo de 1980 en Sinaloa, es considerado uno de los operadores logísticos del Cartel de los Beltrán Leyva, particularmente bajo el mando de Óscar Manuel Gastélum Iribe (“El Músico”) y Fausto Isidro Meza Flores (“Chapo Isidro”).
Según El Sol de Yucatán, las autoridades estadounidenses lo identifican como pieza clave en el envío de fentanilo y metanfetamina a Estados Unidos, y utilizaba rutas que cruzan desde México hacia estados como California, Arizona, Oregon, Illinois y Ohio.
En 2021, “El Payo” fue vinculado a una incautación histórica en el puerto fronterizo de Otay Mesa, California, una operación denominada “Methzilla”, en la que se decomisó un cargamento récord de drogas sintéticas. Esta red operaba también en Colombia, Ecuador, Costa Rica, Honduras y Guatemala.
¿Será extraditado a Estados Unidos?
El gobierno de Estados Unidos ya había solicitado información sobre Bastidas Erenas, quien enfrenta cargos formales por narcotráfico en una corte del Distrito Sur de California. Aunque aún no se ha emitido oficialmente la solicitud de extradición, fuentes de seguridad federales no descartan que se active en los próximos días, especialmente por su papel en el tráfico transfronterizo de fentanilo.
Este arresto ocurre en el marco del acuerdo bilateral entre México y Estados Unidos denominado “Operación Frontera Norte”, anunciado en febrero de 2025, y que ha logrado la detención de más de 3,500 personas, esto incluye objetivos prioritarios del FBI, según informó el sitio de López Doriga.
El operativo que dio con “El Payo”
Según la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), la captura fue resultado de un trabajo coordinado entre la Agencia de Investigación Criminal (AIC), la Fiscalía General de la República (FGR), la Guardia Nacional (GN), la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y la Marina (Semar), asegura El Siglo.
Un juez de control autorizó una orden de cateo tras reunir pruebas que lo vinculaban con el tráfico de drogas sintéticas.
Armas decoradas y simbología del cartel: el arsenal de “El Payo”
El Sol Yucatán señala que, durante el cateo al domicilio ubicado en Los Mochis, Sinaloa, elementos de las fuerzas federales incautaron dos armas de fuego cortas altamente personalizadas, las cuales han llamado la atención por sus características poco comunes.
Ambas estaban decoradas con incrustaciones y detalles en color dorado, lo que sugiere un alto nivel de personalización y simbolismo dentro del mundo del crimen organizado.
Una de las pistolas presentaba grabados con la imagen de cuatro sujetos en la corredera, los cuales, según los informes de seguridad, representarían a los hermanos Beltrán Leyva: Arturo, Alfredo, Carlos y Héctor, fundadores de la organización criminal a la que pertenece “El Payo”. Esta representación refuerza la hipótesis de su lealtad y vinculación directa con el cartel, así como su posible rol dentro del círculo cercano de liderazgo operativo.
La segunda arma tenía una empuñadura adornada con una figura tallada del calendario azteca, un símbolo frecuentemente utilizado por cárteles mexicanos como elemento de identidad cultural, poder y dominación territorial.
Las autoridades consideran que estas armas no eran únicamente funcionales, sino que cumplían una función simbólica, posiblemente utilizadas en contextos de mando o como distintivos de alto rango dentro del grupo delictivo.
La caída de otro operador del narco y el impacto en la estructura criminal
“El Payo” fue uno de los 15 mexicanos sancionados por el Departamento del Tesoro de EE.UU. el 6 de diciembre de 2023, por vínculos con el tráfico internacional de drogas. Su captura representa un duro golpe al cartel, que desde su ruptura con el Cártel de Sinaloa en 2008 ha intentado mantener su estructura con rutas hacia Centroamérica y redes de distribución en Estados Unidos.
Desde Sol de Yucatán consideran que su eventual extradición podría generar fracturas internas dentro del grupo liderado por “Chapo Isidro”, además de permitir a fiscales estadounidenses ampliar las investigaciones contra otros operadores mexicanos.