
El dolor de estómago puede manifestarse en cualquier zona comprendida entre el pecho y la ingle, y su intensidad y localización varían en función de la causa. Este malestar, que a menudo se acompaña de síntomas como ardor, hinchazón o náuseas, puede estar relacionado con afecciones tan diversas como la indigestión, el síndrome del intestino irritable o infecciones víricas.
El dolor abdominal suele deberse a causas comunes como gases, indigestión, estreñimiento o diarrea, aunque también puede estar relacionado con infecciones como la gripe. Entre las causas menos frecuentes se encuentran afecciones como la obstrucción intestinal o la apendicitis. Las alergias e intolerancias alimentarias, especialmente a la lactosa, el gluten o determinados aditivos, pueden provocar dolor y distensión abdominal. En estos casos, se recomienda consultar con un profesional sanitario para valorar la realización de una dieta de eliminación o pruebas específicas.
Según recoge la doctora Cynthia Taylor Chavoustie para Medical News Today, existen diversos remedios caseros que pueden contribuir a aliviar estas molestias, aunque la elección de la solución más adecuada depende siempre del origen del dolor.
Buena hidratación
Entre las estrategias más habituales para combatir el dolor de estómago desde casa, destaca la importancia de mantener una hidratación adecuada. El organismo necesita agua para digerir y absorber correctamente los nutrientes, y la deshidratación dificulta este proceso, incrementando la probabilidad de sufrir molestias digestivas. Además, el consumo de agua puede ayudar a reducir el ardor de estómago.
La Academy of Nutrition and Dietetics recomienda como pauta general la ingesta de ocho vasos de agua de 240 mililitros al día, aunque las necesidades individuales pueden variar en función de la actividad física, la altitud, la temperatura, el estado de salud y el tamaño corporal.
Evitar tumbarse
Otra recomendación consiste en evitar tumbarse inmediatamente después de comer, ya que la posición horizontal favorece que el ácido gástrico ascienda y provoque ardor. Por ello, se aconseja esperar varias horas antes de acostarse si se experimenta malestar estomacal.
El método BRAT
El denominado método BRAT (acrónimo en inglés de plátano, arroz, compota de manzana y tostadas) es una pauta dietética que los profesionales sanitarios suelen recomendar en casos de diarrea. Estos alimentos, al ser insípidos y no irritar el aparato digestivo, pueden ayudar a reducir la frecuencia de las deposiciones y aliviar la irritación de los tejidos provocada por los ácidos del vómito. Además, aportan nutrientes como potasio y magnesio, que se pierden durante los episodios de diarrea y vómitos.
Evita el tabaco y el alcohol
Evitar el tabaco y el alcohol es fundamental, ya que ambos pueden desencadenar indigestión y agravar enfermedades como el reflujo gastroesofágico. Dejar de fumar y moderar el consumo de alcohol no solo mejora la salud digestiva, sino que también reduce el riesgo de desarrollar otras patologías, como el cáncer. No obstante, abandonar estos hábitos puede requerir apoyo adicional.
Eliminar los ultraprocesados de la dieta
En cuanto a la alimentación, se recomienda prescindir de productos difíciles de digerir, como los alimentos ultraprocesados, grasos o muy condimentados, para reducir el malestar y el dolor abdominal.
El bicarbonato sódico como opción
Algunos profesionales sugieren que el bicarbonato sódico puede aliviar el ardor y la indigestión al reducir la acidez estomacal, aunque su sabor puede resultar desagradable y un consumo excesivo puede provocar efectos adversos, como alteraciones en los niveles de potasio o presión arterial.
Frutas contra el estreñimiento
Ciertos alimentos, como los higos y otras frutas, contienen compuestos con efecto laxante que favorecen el tránsito intestinal y pueden aliviar el estreñimiento y la indigestión. Sin embargo, en caso de diarrea, se desaconseja su consumo por su potencial para agravar el cuadro.
