El paro de transportistas convocado para este jueves 21 de agosto ha generado un intenso debate dentro del sector. Héctor Vargas, presidente de la Coordinadora de empresas de transporte urbano, cuestionó abiertamente la convocatoria y puso en duda el liderazgo de Martín Valeriano, presidente de la Asociación Nacional de Integración de Transportistas (Anitra), responsable del llamado a la paralización.
Desde el anuncio de la protesta, Vargas expresó sus diferencias con la postura de Valeriano y planteó la necesidad de buscar caminos alternativos que no perjudiquen a quienes utilizan a diario el transporte público. “Hemos parado en septiembre del año pasado, hemos parado en abril, por lo mismo que hoy día se pretende parar. Como no se ha conseguido nada, hay que buscar alternativas” afirmó el titular de la Coordinadora.
La fractura entre las dirigencias del sector ha quedado en evidencia ante la opinión pública. Para Vargas, las diferencias y descoordinaciones entre los líderes gremiales “han hecho creer a la población que somos parte del sector informal”, una percepción que considera equivocada y negativa para el sector formal.
El presidente de la Coordinadora también rechazó los argumentos de Valeriano, quien acusó a los empresarios de “privilegiar su bolsillo” por encima del bienestar de los usuarios y trabajadores. Vargas defendió el comportamiento institucional de su organización y aseguró que “nosotros sí convocamos a reuniones y en la Asamblea General tomamos la decisión de no parar, a pesar de que hay razones para parar”.
Para Vargas, resulta fundamental que las decisiones en torno al paro nacional reflejen los intereses reales de los transportistas y no se basen en motivaciones personales o disputas por la representatividad gremial. “No podemos llevar a un paro a los usuarios solo motivados por apetitos personales”, expresó el dirigente.
Tolerancia para trabajadores
Horas antes del paro de transportistas previsto para este jueves 21 de agosto, el Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo (MTPE) no emitió ningún pronunciamiento oficial sobre la posibilidad de otorgar tolerancia de horario a trabajadores afectados por las restricciones en el transporte público. Esta ausencia de directiva oficial contrasta con ocasiones anteriores, cuando la cartera laboral solía conceder entre dos y cuatro horas de flexibilidad. Ante la ausencia de una disposición general, cada empresa o institución privada ha decidido de forma autónoma si brinda facilidades internas a sus empleados. Algunas compañías comunicaron internamente la aplicación de tolerancia en el horario, aunque se trata de decisiones particulares y no de una política generalizada.
Representantes laborales advirtieron que esta falta de orientación puede provocar diferencias entre los sectores público y privado, dependiendo de la flexibilidad de cada empleador. El Ministerio de Trabajo mantiene sus canales oficiales activos, pero hasta el cierre de este reporte no publicó orientaciones sobre movilidad laboral o ingreso horario ni para Lima ni para otras ciudades.
En el sector educativo, varias universidades optaron por clases virtuales. En contraste, el ministro de Educación no impuso la virtualidad en colegios y anunció monitoreo constante de la situación junto con Transportes.
Primer reporte
El ministro de Transportes y Comunicaciones, César Sandoval, declaró que en las primeras horas del jueves 21 de agosto el servicio de transporte formal en Lima funcionaba con relativa normalidad, pese al paro nacional convocado por gremios de transportistas. Estimó que el flujo de vehículos alcanzaba entre el 80% y el 90% de la circulación habitual, aunque no ofreció una cifra exacta al inicio de la jornada.
Sandoval aseguró que los conductores afiliados a asociaciones formales cumplían sus rutas y que la demanda de pasajeros se atendía progresivamente. Además, enfatizó la labor de la Policía Nacional del Perú para garantizar la seguridad en las principales vías y evitar incidentes generados por grupos opuestos al funcionamiento regular del transporte. El ministro también se refirió a la problemática de las extorsiones, reconoció que afecta a diversos sectores y explicó que el gobierno trabaja con el Ministerio del Interior en operativos conjuntos.