La reciente emisión del programa de Magaly Medina volvió a encender la polémica, esta vez luego de que la conductora arremetiera con fuerza contra Sofía Franco, a quien acusó de lanzar afirmaciones sin pruebas y de minimizar el trabajo de sus reporteros al sugerir que Analía Jiménez habría sido quien filtró información para el ampay de Jean Paul Gabuteau.
Lo que parecía ser un comentario más dentro de un panel se convirtió en gasolina pura sobre un fuego que ya ardía desde hace días debido al escándalo entre Silvia Cornejo, su esposo y la madre del hijo mayor del empresario. Esta vez, Magaly no dejó pasar ni una coma y lanzó advertencias directas que dejaron claro que no estaba dispuesta a permitir que nadie, mucho menos Sofía, cuestione la labor de su equipo.
Todo empezó cuando Medina abrió el bloque con una frase que marcó el tono de lo que venía: “Empecemos con, hay gente que yo no sé cómo llamarla”. Para ella, la actitud de Sofía Franco reflejaba el descaro de quienes, según dijo, “no se acuerdan del gran rabo de paja que arrastran”.

Magaly Medina tilda de ‘caradura’ a Sofía Franco
La calificó de ‘caradura’, asegurando que resultaba insólito que alguien con su historial se atreviera a comentar un tema tan delicado como el de las relaciones paralelas y los conflictos familiares de otros.
Magaly no dudó en cuestionar la decisión de Franco de opinar sobre el caso, recordándole que, si quería evitar recibir respuestas como la de esa noche, debió quedarse callada. Sofía afirmó que la mayoría estaba convencida de que Analía Jiménez tenía al “chismefono” entre sus contactos favoritos.
En ese momento, otro panelista de Latina reforzó la idea, diciendo que “hay un soplón de todas maneras” en cada ampay y que “siempre es una de las partes”. Lo que provocó que la conversación escalara fue la afirmación directa: “En este caso, Analía. Lo sabemos, no hay cómo ocultarlo”.

Le pide pruebas
Eso bastó para encender la indignación de Magaly. Con el ceño fruncido y un tono firme, respondió: “Vaya, resulta que ahora esta mujer sentencia, afirma que a nosotros nos llama para datearnos Analía Jiménez”.
La conductora remarcó que tales afirmaciones eran gravísimas y que Sofía no podía asegurar algo así sin pruebas. “Eso se llama, Sofía Franco, por si acaso… difamación”, advirtió, recordándole que su esposo es abogado y que suele amenazar con demandar.
Medina aseguró que ella también podría responder legalmente: “Yo también podría decir ahora y con razón que la puedo demandar por treinta millones de dólares por el daño que está haciendo al honor, prestigio y trayectoria del programa”.

Posible demanda
A medida que avanzaba su descargo, Magaly fue más dura, acusando a Sofía de denigrar la labor de un equipo que trabaja durante meses en investigaciones. Recalcó que Sofía jamás podría realizar el tipo de trabajo que hacen sus reporteros y le recordó los programas de bajo alcance en los que participó. “Pobrecitos, programas lastimeros”, dijo, antes de añadir que Franco no era más que una figura a la que llamaban “para tapar huecos”.
La conductora insistió en que Sofía debía presentar pruebas de lo que dijo. “Anda buscando tus pruebas y pónmelas”, exigió, repitiendo que no permitiría que se cuestione sin fundamentos el trabajo de su equipo. Para Magaly, Franco había adoptado una actitud soberbia desde que fue colocada como opinóloga en el set, creyéndose, según dijo, “la catedral de las opinólogas”.

Cuando el panel discutía sobre Silvia Cornejo y el escándalo que enfrenta tras un nuevo ampay de Jean Paul con Analía, Sofía se dirigió directamente a Silvia, alentándola a sacar su carácter: “Te queremos con esa personalidad guerrera que te caracteriza. Tú no eres suavecita y mucho menos tonta”. Pero el conductor de “Arriba mi gente”, Fernando Díaz, aprovechó para cuestionarla, recordándole que ella también vivió una situación delicada con el padre de su hijo. “Sofi, pero Silvia te la podría devolver”, dijo, insinuando que la conductora también había sido pasiva ante una crisis personal.
Franco respondió intentando diferenciar su caso: “Son diferentes escenarios… el padre de mi hijo, por ejemplo, tiene solamente un hijo. No hay esa lucha de verdad tan fuerte”. Sin embargo, Magaly no dejó pasar la oportunidad de recordarle uno de los episodios más duros de su pasado: la conferencia de prensa en la que su expareja la llamó “alcohólica, drogadicta y ludópata”. Medina subrayó que esas acusaciones se hicieron “en señal abierta, ante todos los noticieros del país”, insinuando que Sofía parecía haber olvidado ese capítulo.

Magaly fue tajante: “Ella ahora se vende como una mujer empoderada, lo que nunca ha sido”. Aseguró que Franco tenía un “papel lastimero” y que, a pesar de haber recibido ayuda, terminó regresando con su expareja. Para Medina, eso le resta autoridad moral para opinar sobre otras mujeres que atraviesan conflictos similares.
En su cierre, Magaly remarcó que Sofía debería saber cuándo opinar y cuándo callar, especialmente en temas en los que, según manifestó, no tiene autoridad. “Yo que tú bajaba la cabeza y me hacía la tonta”, dijo, antes de lanzar una última advertencia que resonó en redes sociales: “A veces hay que saber cuándo opinar y cuándo no. Sobre todo cuando este es un tema en el que tú no deberías abrir la boca”.

