La historia de amor entre Melissa Klug y Jesús Barco parece haber llegado definitivamente a su final. La empresaria chalaca confirmó en exclusiva para el programa ‘Magaly TV: La Firme’ que su relación con el futbolista terminó, dejando entrever una profunda decepción tras descubrir comportamientos que no estaba dispuesta a tolerar.
Durante una conversación con la producción del programa conducido por Magaly Medina, la popular ‘Blanca de Chucuito’ fue clara y directa al revelar que la ruptura se dio luego de que le llegaran comentarios sobre la conducta del padre de su última hija mientras él se encontraba en Huánuco.
“Acá él está jugando, pero está saliendo con una de acá de Huánuco”, fue uno de los mensajes que la empresaria habría leído en redes sociales y que, según confesó, despertaron en ella una gran molestia y desconfianza.
Ya no confía en él
Según el informe emitido por el programa, la chalaca no tardó en comunicarse con la producción para confirmar lo que ya era un rumor a voces: su relación con el futbolista había llegado a su fin. Frente a las cámaras, Melissa no solo ratificó la separación, sino que dejó entrever que esta vez no habría vuelta atrás.
“Como te dije, estamos separados, atravesando una crisis de pareja por falta de comunicación. Supuestamente, hasta lo que yo sabía, no era por terceras personas”, expresó con visible incomodidad, intentando mantener la calma pese al dolor que siente en estos momentos.
Sin embargo, sus palabras posteriores revelaron que había algo más que simples “problemas de comunicación”. Melissa deslizó la posibilidad de que los rumores sobre la supuesta presencia de otras mujeres en la vida de Barco podrían ser ciertos. “Yo sé que esos jugadores llevan mujeres todo el tiempo, yo los he visto cuando he estado allá. El simple hecho de estar él presente, es una falta de respeto. Qué más habrá hecho, no lo sé”, manifestó contundente, dejando clara su postura sobre los límites que, para ella, se habían cruzado.
Esta declaración dejó en evidencia no solo la ruptura amorosa, sino también el desgaste emocional que la empresaria ha venido arrastrando en los últimos meses. Melissa, madre de varios hijos y con una vida pública intensa, se mostró más reflexiva y enfocada en su bienestar personal. “Ahorita estoy mentalizando en recuperarme, yo sabré qué decisión tomar”, añadió, dando a entender que su prioridad ya no es salvar una relación desgastada, sino reencontrarse consigo misma.
El origen del conflicto se remonta al pasado 20 de septiembre, cuando ‘Magaly TV: La Firme’ difundió un video que encendió las alarmas en la vida sentimental de la empresaria. En las imágenes, grabadas al borde de una piscina, se veía al futbolista Jesús Barco acompañado de un grupo de mujeres, disfrutando del sol y aparentemente pasando un día libre. Si bien las imágenes no mostraban nada explícito, el contexto fue suficiente para que la desconfianza se instalara en la relación.
Magaly Medina, fiel a su estilo incisivo, no dudó en comentar la situación durante la emisión de su programa, analizando las actitudes del jugador y las reacciones de Melissa Klug. La conductora señaló que, más allá de las versiones o las excusas, la empresaria parecía haber llegado a un punto de saturación emocional. “Cuando una mujer decide poner punto final a una historia, suele ser porque ya lo intentó todo”, comentó Medina, empatizando con la situación de su invitada.
La historia de Melissa Klug y Jesús Barco había empezado con fuerza y cariño. Ambos solían mostrarse unidos y cómplices en redes sociales, compartiendo viajes, celebraciones familiares y planes de futuro. Incluso se habló en su momento de una posible boda, pero con el paso del tiempo las diferencias comenzaron a notarse. Mientras Melissa se concentraba en sus hijos y sus negocios, Jesús parecía más inmerso en su carrera deportiva y en su vida social, lo que habría terminado por alejarlos.
Hoy, la ‘Blanca de Chucuito’ se encuentra en un proceso de reconstrucción personal. Según allegados a su entorno, está enfocada en su salud emocional y en retomar sus proyectos empresariales, dejando atrás los episodios de decepción. En sus propias palabras, busca paz, estabilidad y tiempo para sí misma. “Todo pasa por algo, y uno tiene que aprender de cada experiencia”, habría mencionado a personas cercanas, mostrando que, a pesar de la tristeza, está decidida a seguir adelante.
Aunque el futuro de su relación con Jesús Barco parece incierto, lo que sí está claro es que Melissa Klug no está dispuesta a tolerar actitudes que la hagan dudar de su valor o de su confianza. Con la madurez que la caracteriza, ha optado por priorizarse.