En el marco de la Cumbre de los BRICS —grupo conformado por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, al que recientemente se han sumado otras economías emergentes—, el exsecretario de Relaciones Exteriores, Juan Ramón de la Fuente, sostuvo una reunión bilateral con Sergio Díaz-Granados, presidente ejecutivo del Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe (CAF), centrada en mecanismos de colaboración regional y financiamiento al desarrollo.
El encuentro incluyó una revisión de los alcances del Plan México y de la próxima Cumbre para el Bienestar Económico de América Latina y el Caribe, ambas impulsadas por la actual administración federal. Las iniciativas buscan ampliar la cooperación entre países de la región y fomentar el financiamiento de proyectos de desarrollo económico y social.
Uno de los puntos relevantes de la reunión fue la reciente adhesión de Guatemala al CAF, que, según los funcionarios, representa una oportunidad para fortalecer proyectos binacionales entre México y ese país, particularmente en la región Sur-Sureste mexicana. La discusión giró en torno a cómo esta ampliación del banco regional puede facilitar el diseño y ejecución de iniciativas conjuntas de infraestructura, desarrollo productivo y bienestar.
La integración de más países al CAF también fue señalada como un paso hacia una mayor coordinación regional para atender retos comunes, incluyendo desigualdad, crecimiento inclusivo y acceso a financiamiento para proyectos estratégicos. En este contexto, el canciller De la Fuente y Díaz-Granados exploraron mecanismos para escalar la participación de México en esquemas de financiamiento multilateral y su vinculación con agendas como la integración regional y la cooperación Sur-Sur.
El Plan México, en particular, contempla el impulso a corredores logísticos, infraestructura energética y movilidad transfronteriza, con énfasis en zonas históricamente rezagadas. Estas prioridades fueron compartidas con el CAF como parte de la agenda conjunta para atraer inversión y respaldar proyectos sostenibles.
Además, en la conversación se abordó el papel que puede jugar la próxima Cumbre para el Bienestar Económico como plataforma para coordinar esfuerzos multilaterales y establecer prioridades comunes en el acceso al financiamiento, la inversión regional y el fortalecimiento institucional.
La cumbre anual de los BRICS inició este domingo en Río de Janeiro, Brasil, con la participación de representantes de once países emergentes, aunque sin la asistencia de los líderes de China, Xi Jinping, y de Rusia, Vladimir Putin. Este foro, fundado por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, enfrenta presiones internacionales, principalmente de Estados Unidos, cuyo presidente, Donald Trump, mantiene amenazas comerciales contra el bloque.